Madrid, 5 ene (RHC) A una semana de la constitución del Parlamento, el presidente del Gobierno en funciones Mariano Rajoy insistió en pedir un acuerdo con el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) y Ciudadanos que garantice su investidura.
Entrevistado por la radioemisora Cope, el también líder del conservador Partido Popular (PP) demandó respetar el resultado de las elecciones generales del 20 de diciembre último, en las que su agrupación obtuvo la mayor cantidad de votos, pero perdió la mayoría absoluta, informa Prensa Latina.
En esos comicios, que dejaron una inédita fragmentación en el Congreso de Diputados, el PP se convirtió en la fuerza más votada con 123 escaños en la Cámara baja, muy lejos de los 176 asientos que marcan la hegemonía parlamentaria.
Debemos intentar unir a los partidos que defendemos cosas esenciales, remarcó el gobernante saliente, tras asegurar que no pondrá líneas rojas a un eventual pacto a tres, imprescindible para su reelección como jefe del ejecutivo otros cuatro años.
Subrayó que una alianza de los conservadores con el PSOE y Ciudadanos estaría refrendada por más de 200 diputados en el Congreso, en alusión a los escaños obtenidos por los socialistas (90) y la agrupación de centroderecha (40).
Una coalición que, señaló, permitiría hacer reformas con un amplísimo respaldo y daría estabilidad al país.
Advirtió sobre un hipotético gobierno del PSOE con Podemos (centroizquierda) y otras fuerzas progresistas, bloque que calificó de extrema izquierda.
A juicio de Rajoy, una asociación de ese tipo sería negativa para los intereses de España y generaría inestabilidad económica y política.
Opinó que al PP y al PSOE, las dos formaciones tradicionales que desde 1982 se alternan en el poder, les une lo fundamental: la soberanía nacional, la pertenencia a la Unión Europea y la política exterior.
Son muchas más las cosas que nos unen que las que nos separan, enfatizó el político conservador, quien apostó por empezar a acostumbrarse a los gobiernos de coalición como el resto de Europa, tras el descalabro del bipartidismo español en los pasados comicios.
Pese a la negativa de los socialistas y de Podemos -convertida en la tercera fuerza política con 69 escaños- a apoyar su continuidad, Rajoy afirmó que se presentará a la investidura incluso sin tener garantizados los votos necesarios para su reelección.
Respecto a la situación en Cataluña, abocada a nuevas elecciones tras el rechazo de una parte de los independentistas a respaldar la permanencia del presidente del gobierno catalán, Artur Mas, Rajoy dijo no ver otra salida que ir a una nueva cita con las urnas.
Alertó que el Estado español cuenta con los medios suficientes para defender la soberanía nacional y bloquear las aspiraciones secesionistas de esa comunidad autónoma.