Washington, 20 feb (RHC) El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, afirmó en Washington que su visita a Cuba, el 21 y 22 de marzo venidero, es otro paso para normalizar las relaciones bilaterales con nuestro país, aunque no mencionó el tema del bloqueo.
En su tradicional discurso sabatino a la nación, expresó Obama confianza en que su viaje a La Habana contribuirá al avance de las metas comunes entre ambos gobiernos, aunque solo se refirió a los intereses estadounidenses, como el fortalecimiento del sector privado y un mayor acceso a Internet, obviando el cerco económico, comercial y financiero contra Cuba.
Reiteró también el primer mandatario norteamericano que dialogará cordialmente con las autoridades cubanas sobre democracia y derechos humanos, y destacó el respaldo mayoritario a la nueva relación de su país con la nación caribeña.
Por otra parte, este sábado, el diario ecuatoriano El Telégrafo solicita al jefe de Estado norteamericano reafirmar el respeto mutuo durante su visita a La Habana y no imponer sus puntos de vista en asuntos internos de los cubanos.
Según el texto, si el mandatario estadounidense visita a la isla caribeña el 21 de marzo próximo, tal y como anunció esta semana la Casa Blanca, no puede ir a decir lo que deben hacer sus gobernantes, porque a su par cubano Raúl Castro, asegura, jamás se le ocurriría un despropósito diplomático de esa envergadura.
Las relaciones entre dos países buscan la hermandad, la colaboración y el mayor respeto para cada uno de ellos, afirma el periódico, el cual recuerda que la nación norteña es en gran medida responsable de las dificultades por las que atraviesa el pueblo cubano, como resultado del bloqueo económico, financiero y comercial, y las amenazas militares aplicadas durante más de cinco décadas.
Tras resaltar que los vínculos entre Cuba y Estados Unidos están en su mejor nivel, luego del acercamiento iniciado por ambos gobiernos el 17 de diciembre de 2014, El Telégrafo considera, no obstante, que se debería apartar a la llamada "gusanera", en alusión a los grupos de origen cubano radicados en territorio norteamericano, que en su opinión, son los que impiden relaciones plenas y sanas entre las dos naciones.
Con el anuncio de la visita de Barack Obama a La Habana, para el próximo 21 de marzo, se reafirma la voluntad de acabar un diferendo causado por una actitud intervencionista de una política reaccionaria que sobrevivió a la Guerra Fría, asevera el diario ecuatoriano.