Madrid, 9 abr (RHC) La agrupación de centroizquierda Podemos achacó al PSOE, Partido Socialista Obrero Español, el bloqueo de la situación política en ese país, con un gobierno interino desde las elecciones generales del pasado 20 de diciembre.

En una entrevista que publica el diario La Vanguardia, de Barcelona, el secretario político de la llamada formación morada, Íñigo Errejón, afirmó que la salida de la actual parálisis institucional está en manos de los socialistas.

Todo dependerá de lo que decida finalmente el Partido Socialista, advirtió el dirigente, tras señalar que quedan más de dos semanas para intentar un acuerdo, así como defendió la consulta que la agrupación realizará la semana próxima, en la que preguntará a sus casi cuatrocientos mil militantes si quieren un gobierno en España basado en el pacto PSOE-Ciudadanos, o la coalición de izquierda defendida por Podemos.

Por su parte, el líder de Podemos, Pablo Iglesias, defendió la negativa de su formación a apoyar un gobierno en España entre el PSOE y Ciudadanos (C's), agrupación de centroderecha considera afín al conservador Partido Popular (PP).

En un encuentro con centenares de miembros de los círculos de su organización en Cataluña, Iglesias subrayó que Podemos fue fundado en enero de 2014 para cambiar la manera de hacer las cosas en este país europeo, sometido durante décadas al bipartidismo PSOE-PP.

No llegamos hace dos años para que todo siga igual y convertirnos en una organización política subyugada, advirtió el dirigente, quien abogó por una coalición progresista del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) con Podemos, Izquierda Unida y Compromís.

Aclamado por más de 600 partidarios en Barcelona, el joven profesor universitario afirmó que en los últimos días la llamada formación morada resistió la voluntad de otras fuerzas de intentar "domesticarla".

Aludió a las presiones recibidas tanto desde las filas del PSOE como de C's para que Podemos respalde, por activa o por pasiva, el polémico pacto sellado por el secretario general de los socialistas, Pedro Sánchez, con su par de Ciudadanos, Albert Rivera.

"No somos como ellos. No queremos que Podemos se convierta en lo que quieran los adversarios de la gente", ratificó Iglesias, quien descartó el apoyo de la agrupación antiausteridad a un hipotético gobierno de Sánchez y Rivera.

Lo cómodo sería pasar a la oposición, pero nosotros nos presentamos a las elecciones del 20 de diciembre porque creemos que las cosas se pueden cambiar desde las instituciones, enfatizó el secretario general de la tercera fuerza parlamentaria.

Según su impresión, "algunos muy poderosos" prohibieron a Sánchez hacer posible un ejecutivo progresista, pero insistió en que el partido morado no se venderá y pasará a la oposición si es preciso.

Apuntó que la única manera de evitar unos nuevos comicios sería un cambio de rumbo de su homólogo socialista o la gran coalición PSOE-PP-C's, promovida por el jefe del Ejecutivo en funciones Mariano Rajoy.

A esas tres fuerzas les recriminó su falta de contundencia respecto a la corrupción, fenómeno que achacó a una determinada forma de gobernar que permite "vender la patria a cachitos".

En su opinión, esa lacra no se arregla diciendo que está mal, sino con políticas desde los ministerios de Economía y de Hacienda.

A preguntas de los asistentes al acto, Iglesias indicó que su gran reto es captar el voto de los jubilados, y vaticinó que si lograran seducir a ese sector de la población Podemos ganará los comicios si finalmente se repiten en junio.