Damasco, 14 abr (RHC) El enviado especial de la ONU para Siria, Staffan de Mistura, informó que la delegación gubernamental de ese país llegará este viernes a Ginebra para incorporarse a la nueva ronda de conversaciones de paz iniciada la víspera.
De acuerdo con De Mistura, la delegación del gobierno de Damasco estará encabezada por el embajador, Bashar Jaafari, y permitirá un impulso al proceso que busca poner fin a cinco años de conflicto en la nación árabe.
También insistió el funcionario de la ONU en que la nueva ronda de negociaciones debe centrarse en el tema de la transición política, basada en la hoja de ruta para la paz, adoptada el último diciembre, que incluye la realización de elecciones dentro de 18 meses, al amparo de una nueva Constitución.
En tanto, el pueblo de Siria espera en calma los resultados de las elecciones legislativas que se realizaron este miércoles con una masiva participación de electores.
Siria denunció en el Consejo de Seguridad de la ONU la complicidad de algunas potencias regionales y mundiales con el terrorismo que sufre el pueblo de ese país árabe desde el 2011.
El encargado de negocios sirio en el órgano mundial, Mounzér Mounzér, rechazó en particular el apoyo de Arabia Saudita y Turquía a los extremistas, quienes siembran destrucción y muerte en el Medio Oriente.
El diplomático aseveró que ambos gobiernos suministran dinero y armas a los grupos, los cuales sirven de punta de lanza a occidente y sus aliados en la búsqueda de un cambio de régimen en Damasco.
La política estadounidense hacia el Medio Oriente está en un letargo, y los líderes de la región dudan del compromiso de este país con ellos, dijo el presidente de la Cámara de Representantes norteamericana, Paul Ryan.
Nuestros amigos quieren saber si aún estamos dentro del juego, están preocupados y quieren saber si aún somos un socio estratégico fuerte como lo fuimos en el pasado, por lo que mi tarea fue garantizarles eso, añadió.
Según Ryan, a los políticos del área les preocupan en particular las recientes declaraciones del presidente Barack Obama a la publicación The Atlantic, en las que el mandatario los caracterizó de personalidades frustrantes que buscan explotar la fuerza de Washington para sus propios intereses sectarios y estrechos.
El legislador republicano por Wisconsin dijo que el mundo observa con atención el desarrollo de la política en Estados Unidos y añadió que él puede entender cómo los aliados en el Levante están inquietos por los comentarios provocativos del precandidato del partido rojo Donald Trump.
Ryan encabezó una delegación del Capitolio que visitó recientemente Israel, Jordania, Arabia Saudita y Egipto, donde se entrevistó con las principales figuras de esas naciones.
Por otra parte, Obama afirmó ayer que su Administración obtuvo progresos en los últimos meses en la lucha contra el Estado Islámico (EI) en Siria e Iraq, incluso en momentos en que el incremento de la violencia de los fundamentalistas pone en peligro lo que hasta ahora se alcanzó en la zona.
Durante una inusual visita a la sede de la CIA en Langley, Virginia, el mandatario resaltó que los últimos meses fueron negativos para el EI y dio detalles sobre las áreas en que las fuerzas apoyadas por Washington recuperaron territorio ocupado por los fundamentalistas.
En meses recientes, la estrategia de Obama en la región estuvo en el centro de una fuerte controversia, pues el liderazgo republicano y algunos de los aliados de Washington lo acusan de que su accionar no es lo suficientemente agresivo y las fuerzas del EI siguen activas.