Quito, 21 may (RHC) El presidente de Ecuador, Rafael Correa, aseguró que la actividad económica en las provincias de Esmeraldas y Manabí recibió golpes muy serios por el terremoto del pasado 16 de abril y sus recientes réplicas.
El sismo original, de 7,8 de magnitud en la escala de Richter, dejó 661 muertos, una decena de desaparecidos y al menos 30 mil personas sin hogar en la costa noroccidental ecuatoriana; mientras, las réplicas -que ya superan las mil 600- incrementaron los daños materiales.
Correa comentó que el sector del turismo, actividad económica fundamental de una provincia como Esmeraldas, comenzaba a recuperarse cuando se dieron esas réplicas más fuertes, por lo cual, el estadista confirmó su decisión de incluir a esa provincia entera en la Ley Solidaria y de Corresponsabilidad Ciudadana por las Afectaciones del Terremoto, recién aprobada por el Parlamento y el Gobierno para ayudar a los damnificados de esa tragedia.
La normativa crea mecanismos de financiamiento para propiciar la reactivación productiva y ayudar a reconstruir la infraestructura de los territorios más afectados.
El jefe de Estado ratificó la disposición gubernamental de construir casas para los damnificados pero en terrenos adecuados, y recomendó acudir mientras a los albergues oficiales, donde todas las necesidades básicas están garantizadas: carpas, servicios elementales, baños, comedores y energía eléctrica, entre otros.
Aunque insistió en que la opción preferida del Ejecutivo es la de "familias acogientes", y para fomentar la modalidad se entregarán créditos e incentivos tanto a estas como a las familias que perdieron sus viviendas.
Los bonos de acogida serán de 150 dólares mensuales por seis meses, las personas que decidan arrendar recibirán 135 dólares al mes por ese mismo período de tiempo, y la familia damnificada recibirá directamente 100 dólares por concepto de alimentación durante tres meses.
En una rendición de cuentas efectuada en el puesto de mando del Servicio Integrado de Seguridad, ECU 911, de Quito, el presidente defendió la adecuada planificación de los nuevos asentamientos de viviendas para propiciar un crecimiento ordenado y factible de las ciudades.