La Habana, 6 junio (RHC)-El Consejo de la Ciudad de Sacramento, capital del estado de California, reclama mediante una resolución poner fin al bloqueo bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos a Cuba, hace más de 55 años y que continúa infligiendo daños a los hombres, las mujeres y los niños de la isla, informó hoy una fuente diplomática del país caribeño.
El texto, divulgado en la cuenta de la red social Twitter de Miguel Fraga, primer secretario de la Embajada cubana en Washington, recuerda que esa política, rechazada a nivel internacional, crea escasez de alimentos y medicinas, y limita las oportunidades comerciales y financieras.
A juicio de la mayoría del pueblo norteamericano, precisa el documento, el bloqueo resulta infectivo e inhumano, y viola las leyes estadounidenses y las convenciones internacionales.
La resolución apoya también los proyectos de ley introducidos en el Congreso por senadores y representantes a favor de la libertad de viaje de los estadounidenses a Cuba y la expansión de las exportaciones agrícolas y el comercio en general con ese país.
Hasta ahora suman seis las urbes de Estados Unidos (cuatro de California y una per cápita de Massachusetts y Connecticut) que adoptaron resoluciones similares sobre este tema, y además lo hicieron las asambleas de dos estados (California y Alabama).
El bloqueo, en vigor desde febrero de 1962, fue rechazado por 191 países el pasado año en la Asamblea General de Naciones Unidas mientras que Estados Unidos, que lo impone, e Israel, su tradicional aliado, se abstuvieron por primera vez en la votación correspondiente.
Washington y La Habana restablecieron relaciones diplomáticas el 20 de julio de 2015 y han firmado decenas de acuerdos y memorandos de entendimiento en diversos sectores como parte de un proceso encaminado a la normalización de sus vínculos bilaterales.
Sin embargo, las autoridades cubanas consideran que el principal obstáculo para alcanzar esa meta es la persistencia del cerco, causante de considerables privaciones y daños humanos a la nación antillana.
(PL)