La Habana, 27 abr (RHC) Todo lo que seamos capaces de proponernos en función de elevar la calidad de nuestra educación pasa por la cultura de las educadoras y educadores, por su preparación política-ideológica y científico-pedagógica. De ahí que la formación y superación del personal docente sea, probablemente, la más estratégica de nuestras misiones y tareas, pues ellos son los sembradores de futuro, dijo la ministra cubana de Educación, Ena Elsa Velázaquez Cobiella, en el Seminario de Preparación del Curso Escolar 2018-2019, que se inició este jueves y tendrá lugar hasta el próximo día 28.
La titular del sector hizo énfasis en la necesidad de fortalecer la labor educativa; aunar voluntades entre la escuela, la familia y la comunidad; implementar iniciativas para la atención integral de los docentes y evaluar el impacto que estas tienen en su desempeño; la preparación y capacitación de los directivos, y el papel de la planificación para el cumplimiento de los objetivos de la educación, informa el periodico Granma.
Sobre la marcha del tercer perfeccionamiento del Sistema Nacional de Educación, Velázquez Cobiella llamó la atención sobre la importancia de involucrarse con rigor en la etapa de validación de los proyectos de los nuevos programas, libros de texto y orientaciones metodológicas para la escuela, en los 152 centros donde se ponen a prueba estos materiales.
El Seminario de preparación pasó revista, además, a los resultados de trabajo del año 2017 en el Ministerio de Educación, donde continúan siendo materias pendientes –grosso modo- el completamiento, idoneidad y estabilidad de la cobertura docente; la correspondencia entre las demandas y necesidades reales en el levantamiento de la base material de estudio y de vida; la preparación de algunos docentes, que todavía no utilizan métodos y procedimientos que favorezcan un aprendizaje consciente y la independencia cognitiva de los alumnos; la calidad de la preparación metodológica; y la inejecución de los planes del proceso inversionista en algunas provincias.
Sobre la recuperación de los centros tras el paso del huracán Irma, trascendió que de 2 264 instalaciones educativas dañadas (el 21,2 %), hasta el 28 de febrero último, 2 073 se reportaban terminadas, y las que aún quedan por recuperar, se ubican en las provincias Artemisa, La Habana, Mayabeque, Matanzas, Villa Clara, Cienfuegos, Sancti Spíritus, Ciego de Ávila, Camagüey y Holguín.
Indicadores con resultados positivos –aunque todavía con mucho camino por andar– están relacionados con la formación y orientación profesional, el ingreso a las escuelas pedagógicas –con el mejor resultado en los últimos cinco años–, la continuidad de estudios del noveno grado, el desarrollo de acciones de superación, la incorporación a la docencia de los especialistas de la producción en los centros politécnicos y escenarios productivos.
Durante estos días los directivos de educación a todos los niveles discutirán sobre el comportamiento de los delitos y conductas que impactan en el sector estudiantil, la atención integral al sistema de formación docente, las proyecciones de trabajo de las organizaciones políticas y estudiantiles, la planificación como elemento esencial del sistema de control interno, los retos y perspectivas de la capacitación en Cuba, entre otros temas.
(Granma)
