La Habana, 22 nov (RHC) El vicepresidente cubano Ramiro Valdés, exigió este jueves en la provincia cubana de Sancti Spíritus trabajar con mayor celeridad para avanzar en el programa de construcción de viviendas y evaluó la marcha del mencionado programa en esa región.
Junto al Comandante de la Revolución, participaron también en el análisis representantes de instituciones vinculadas a ese programa en la región central de nuestro país.
El también Héroe de la República de Cuba, insistió en la necesidad de incrementar las capacidades en la producción local de materiales de construcción para satisfacer los planes de edificación de moradas.
Vivian Rodríguez, directora general de la Vivienda en el Ministerio de la Construcción, informó que el próximo año deben erigirse en el país 50 mil casas, de ellas 20 mil por constructores estatales y el resto por esfuerzo propio de la población.
En Sancti Spíritus también se pretende concluir en el 2020 la reedificación de las moradas que fueron derrumbadas totalmente por el huracán Irma en septiembre del 2017, y por la tormenta subtropical Alberto, en mayo del presente año.
A su vez el general de división de la reserva Ramón Pardo, jefe del Estado Mayor Nacional de la Defensa Civil, refirió que existen organismos internacionales en disposición de donar equipos para las mini-industrias que se están creando con el propósito de incrementar la producción local de materiales de construcción.
Ramiro Valdés hizo énfasis también en las prioridades que se deben tener en cuenta en la entrega de materiales para edificar viviendas, en las que mencionó, en primer lugar a los damnificados por fenómenos naturales y a quienes reciben subsidios para construir las llamadas células básicas habitaciones.
Asimismo se acentuó la necesidad de conformar una estrategia de intervención constructiva dirigida a detener el deterioro del fondo habitacional, y edificar inmuebles más resistentes a los ciclones tropicales que con relativa periodicidad afectan a Cuba, teniendo presente hacerlo en asentamientos urbanizados y cumpliendo los planes de ordenamiento territorial.
Finalmente se llamó a propiciar la participación popular y comunitaria a través del esfuerzo propio de la población, la creación de microbrigadas e incentivar el apoyo de empresas y centros laborales estatales en los planes de viviendas.
(Fuente: ACN).