La Habana, 10 jun (RHC) El ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez dijo que su país se opondrá resueltamente a la aplicación de medidas coercitivas unilaterales, sanciones, aranceles o tarifas punitivas a los productos chinos por parte de EE.UU., y también en otras regiones del planeta.
En entrevista ofrecida a la Agencia de Noticias Xinhua News, del gigante asiático, el canciller declaró, además, que China y los países en desarrollo del Sur son aliados naturales, por lo que Cuba considera una gran oportunidad la extensión a América Latina y el Caribe del megaproyecto la Ruta de la Seda.
Esta iniciativa comercial persigue el objetivo de posicionar a China en una subregión que se encuentra en crecimiento (América Latina y el Caribe), como una posibilidad de incrementar su influencia regional.
Un Cinturón Una Ruta (One Belt One Road, OBOR), es el nombre oficial de esta nueva forma de estimular la economía china y que, visto de forma estratégica, busca que el país asiático reduzca su dependencia de una salida al Pacífico rodeada de territorios aliados de Estados Unidos.
De cumplirse los planes chinos, la ruta donde una vez se comercializaron seda, especias, té, porcelana, oro y plata, podría cambiar la economía mundial, transformar a su paso el pensamiento y la cultura y encumbrar al Gigante Asiático como hiperpotencia a nivel global.
Rodríguez aseguró que las políticas chinas relacionadas con el intercambio económico, comercial y de inversiones en los países del Sur son altamente apreciadas, porque son respetuosas del derecho internacional, la independencia y la soberanía de los países. (Fuente: ACN)