La Habana, 11 ene (RHC) Las asambleas provinciales del Poder Popular se reúnen, este sábado en todo el país, con carácter solemne en su posible última sesión, como resultado de las transformaciones en el Estado cubano que dan paso a nuevas formas de gobiernos locales.
Los delegados provinciales pasarán revista a la labor de más de cuatro décadas, tras las cuales dejan un caudal inestimable de experiencias para el trabajo de las nuevas instancias.
Sus servicios prestados los hacen merecedores del reconocimiento del pueblo y del Partido, razón por la que en esas sesiones se les rendirá un justo homenaje por su dedicación al trabajo del Poder Popular.
Las asambleas provinciales surgieron como parte del proceso de institucionalización del país, que culminó al constituirse en diciembre de 1976 la Asamblea Nacional del Poder Popular, cuando se transfirieron a esta las funciones constituyentes y legislativas que ejerció el Consejo de Ministros durante 18 años, periodo en el que se produjeron, como señaló Fidel, «las más radicales y profundas transformaciones políticas y sociales en la vida de nuestra Patria».
Una nueva división político-administrativa, que cambiaba la existente desde hacía casi un siglo, daba paso a provincias más pequeñas, a municipios más grandes y a la supresión de las regiones, con lo cual ganaban los municipios, las provincias y la nación. Las experiencias del Poder Popular obtenidas durante dos años en Matanzas tuvieron en el General de Ejército Raúl Castro un inspirador exigente en el cumplimiento de los acuerdos del Primer Congreso del Partido al respecto.
El cumplimiento estricto de los plazos para implementar las disposiciones transitorias de nuestra Carta Magna –como la elección de los gobernadores y vicegobernadores, y la constitución de los Gobiernos Provinciales–, trae consigo la profundización de la democracia socialista, la promoción de la mayor participación ciudadana, el desarrollo y la defensa del país.(ACN)