La Habana, 15 may (RHC) Lejos de propiciar la desatención de los más diversos aspectos de la cotidianidad de la nación, el enfrentamiento a la COVID-19 ha ratificado la importancia de mantener como principios de trabajo aspectos determinantes para el futuro del país, como la planificación, el ahorro, el enfrentamiento a la corrupción y las ilegalidades, así como la búsqueda constante de alternativas para sustituir importaciones y potenciar las producciones nacionales.
De tal manera, el Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, y el primer ministro, Manuel Marrero Cruz, dirigieron un nuevo encuentro de trabajo con las principales autoridades de las 15 provincias del país y el municipio especial Isla de la Juventud, donde el Jefe de Estado insistió en el enfoque integrador con que se debe proyectar el desarrollo económico y social de la Isla, destaca el diario Granma.
La extensa agenda de la reunión, donde también participaron el vicepresidente de la República, Salvador Valdés Mesa, y todos los viceprimeros ministros, tuvo como primer punto de análisis la presentación por parte del titular de Economía y Planificación, Alejandro Gil Fernández, de los elementos fundamentales que se han definido para llevar a cabo el ajuste del Plan de la Economía del presente año; las indicaciones para elaborar el Plan 2021; y los principales elementos que definen la estrategia económica que seguirá Cuba para enfrentar la situación provocada por la pandemia.
Estos asuntos, que ya habían sido aprobados con anterioridad en reuniones del Consejo de Ministros, revisten una importancia crucial en el actual escenario, de ahí la insistencia de Gil Fernández en destacar que no se trata de acomodarnos a la situación actual, sino de anticiparnos y hacer todo lo posible para minimizar las afectaciones que podamos tener, e incluso incrementar las actividades productivas.
Es el momento –consideró– de poner encima de la mesa las reservas y trabajar con ellas. Asimismo, ratificó la premisa de ahorrar tanto como sea posible, no solo portadores energéticos; ahorro es no dejar de hacer, es alcanzar los niveles que están previstos en los planes con menos recursos.
En el actual contexto –valoró– se trata de aprovechar las experiencias que nos ha ido dejando esta situación, en todos los escenarios, aplicarlas bien y definir entonces qué medidas se pueden mantener y cuáles perfeccionar para hacer más eficiente la economía.
Asociado a ello, el Primer Ministro convocó a los dirigentes a analizar las medidas específicas que han ido adoptando en sus territorios, las cuales en algunos casos también podrían ser de utilidad en otros.
El regreso a la normalidad –apuntó– tiene que ser sin confiarnos, sin retroceder, y tenemos que lograr que las medidas que vayamos aplicando se acompañen del correspondiente control, para no retroceder en los avances que hemos alcanzado en la contención de la enfermedad.
Durante el encuentro se presentó, además, una evaluación sobre el comportamiento de las indisciplinas, ilegalidades y manifestaciones de corrupción administrativa en el año 2019, aspecto que el Primer Ministro consideró, nos invita a reflexionar sobre la necesidad de hacer las cosas de manera diferente, ponerles pensamiento y acción para buscar más efectividad.
En la reunión se conoció también acerca del enfrentamiento a las ilegalidades vinculadas con el ordenamiento territorial y urbanístico, aspecto en el que las mayores cifras continúan estando en la provincia de La Habana.
Especial atención se brindó a la estrategia que se ha propuesto el país para potenciar la producción de alimento animal con recursos propios, donde sobresale el uso de diferentes plantas proteicas cuyo cultivo se potencia en el territorio nacional. Igualmente, se destacó el importante reto que tienen por delante la Industria Alimentaria y la Agricultura para incrementar, desde el ámbito local, la producción de alimentos para nuestro pueblo.
Más adelante se conoció sobre diferentes medidas que han comenzado a adoptarse en los territorios por las organizaciones de masas y los gobiernos para propiciar el ahorro de electricidad. Dichas decisiones, se aseguró, han demostrado su eficacia, tanto en el sector estatal como en el residencial, al observarse en las últimas semanas una disminución en el consumo de energía eléctrica.
Al comportamiento del Programa Materno Infantil al cierre del cuarto mes del año se dedicó también espacio durante la videoconferencia de este jueves, dada la importancia que reviste su comportamiento para el futuro del país. Es este un tema de seguimiento constante por parte del Gobierno cubano y en el cual se trabaja para solucionar problemas que persisten en lo referido a la organización y calidad de los servicios en la atención primaria y en los hospitales.
Por otra parte, se realizó una breve actualización acerca del cumplimiento del Plan de Estado para el enfrentamiento al cambio climático, conocido como Tarea Vida, como parte del cual se deben continuar adoptando, medidas que respalden la protección del medioambiente en todo el territorio nacional.
Todo lo que hagamos en estos momentos –insistió el Presidente de la República al realizar las conclusiones de la reunión– necesariamente lo tenemos que relacionar con el objetivo fundamental en que estamos inmersos, que es nuestra estrategia de desarrollo económico y social para enfrentar los momentos actuales y también crear las bases del desarrollo futuro del país.
Que todos nos preparemos bien y apoyemos el desarrollo de estas tareas, consideró, al valorar la trascendencia de los temas analizados durante la jornada.
Sobre los aspectos relacionados directamente con la economía, señaló que van a ocupar mucho tiempo en las próximas semanas y meses y deben caracterizarse por un enfoque integral, capaz de proyectarse en función del desarrollo económico y social de la nación.
Insistió en que se comprenda a todos los niveles cuál será el hilo conductor de las acciones de carácter económico que se ha propuesto llevar adelante Cuba en medio del complejo escenario que ha impuesto la covid-19, agravado además por el recrudecimiento del bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por el Gobierno de Estados Unidos y la aplicación del capítulo tercero de la Ley Helms-Burton, con sus consecuencias negativas para el desarrollo de la Mayor de las Antillas.
En la etapa de recuperación del nuevo coronavirus –subrayó– tenemos que estar conscientes de que el país pasará paulatinamente a una normalidad diferente a la que estábamos acostumbrados y eso lógicamente requiere definir bien cómo lo haremos. La vida no va a ser igual, el comportamiento de las personas tampoco lo será –acotó– habrá que seguir manteniendo el distanciamiento físico y analizar con mucha inteligencia qué actividades se van abriendo y en qué momento.
Después de lo que hemos vivido –valoró– tendremos que actualizar nuestros planes de enfrentamiento ante este tipo de situaciones y extraer los mejores aprendizajes, que nos permitan superar las insuficiencias que hemos detectado.
Díaz-Canel manifestó, además, su certeza de que podemos salir fortalecidos de este complejo escenario y poner al país en mejores condiciones para enfrentar la difícil crisis que se vivirá a nivel mundial. Es muy alta la responsabilidad de todas las estructuras de Gobierno para lograr esos propósitos, enfatizó.
De igual manera, reconoció el trabajo realizado por las estructuras del Partido Comunista y el Gobierno en todos los niveles durante estos meses de enfrentamiento a la covid-19, un esfuerzo que cuenta además con el reconocimiento del pueblo, que ha podido apreciar los resultados. «Cuba ha pasado la epidemia sin crisis, sin abarrotamiento de sus salas de terapia intensiva», refirió.
Más adelante, el Jefe de Estado insistió en la necesidad de enfrentar un grupo de ilegalidades y hechos de corrupción que se han acumulado a nivel local, lo cual tiene que hacerse con rigor y sistematicidad por parte de las administraciones territoriales.
Hay que hacer un enfrentamiento tan efectivo que elimine la impunidad, porque para fracturar y aplastar este tipo de hechos se requiere de sistematicidad y rigurosidad en las acciones.
Al referirse a la producción de alimento en el país, subrayó la urgencia de aprovechar todas las alternativas posibles, en todos los escenarios. «Vamos a pensar en el desarrollo desde nuestras potencialidades, desde nuestras raíces, desde lo que está en nuestros recursos naturales», valoró.
Asociado a ello comentó la importancia que reviste la innovación. No solo es investigar –dijo– sino también aplicar lo que ha sido fruto de las investigaciones científicas e incorporarlo a nuestras maneras de hacer, como debe suceder con las experiencias del Programa Sierra Maestra, ejemplificó.
En particular sobre el ahorro en el consumo de electricidad valoró que lo sucedido demuestra una vez más que cuando somos poco sistemáticos en las medidas que adoptamos, las cosas se nos van de la mano. Habíamos avanzado mucho cuando aplicamos las medidas para hacer frente al desabastecimiento de combustible –reconoció– y al más mínimo descuido tuvimos un incremento en el consumo energético. El ahorro tiene que ser un elemento permanente en nuestra conducta, señaló, y es responsabilidad de todos llevarlo a cabo.
Respecto al sensible tema del Programa Materno Infantil, acentuó que los resultados que en todos estos años se han obtenido y consolidado son una conquista de la Revolución que tenemos que seguir perfeccionando en todos los escenarios.
En tal sentido, enfatizó en la prioridad que se debe dar al seguimiento de este asunto; este es un programa sólido y con resultados, que tiene que ser atendido en cada lugar, en dependencia de sus particularidades.
Finalmente, consideró a la Tarea Vida como una de las premisas esenciales que debe tener en cuenta el país para alcanzar un desarrollo sostenible. «Si no preservamos el medioambiente no tenemos desarrollo sostenible y esto también está encadenado con el desarrollo económico y social».