La Habana, 23 jul (RHC) Trece nuevos casos positivos a la COVID-19 se habían confirmado hasta este miércoles en el artemiseño municipio de Bauta. Un suceso que, entre otros indicadores sanitarios, ha incrementado a 2,52 la tasa de incidencia por cada cien mil habitantes en la provincia durante los últimos 15 días.
Precisamente, al análisis del escenario epidemiológico de ese occidental territorio estuvo dedicado el primer punto en la agenda de la reunión del grupo temporal de trabajo para la prevención y control del nuevo coronavirus, que a diario encabezan el Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez y el primer ministro Manuel Marrero Cruz.
Respecto a esa situación puntual, generada producto a una fiesta realizada en la vivienda del primer paciente diagnosticado, el ministro de Salud Pública, José Angel Portal Miranda, informó la decisión de abrir en dicho municipio un evento de transmisión local, en los consejos populares urbanos i y ii, del área de salud Pedro Esperón.
La zona que se pone en cuarentena –explicó– es de las más céntricas del municipio de Bauta, y en ella se incluye la parte comercial; abarca 237 manzanas y tiene un universo de 28 559 habitantes.
Según detalló el titular, de las 24 personas que participaron en la referida actividad, varias viajan con frecuencia a La Habana, lo cual ha ampliado el círculo de contactos de quienes han resultado positivos.
Hasta la mañana de este miércoles –precisó– de los 62 casos estudiados solo se reportaban los 13 pacientes ya informados, aunque al cierre de la reunión del grupo temporal de trabajo se encontraba pendiente el resultado de más de cien muestras Pcr asociadas al evento. Aseguró, además, que desde la jornada del martes se comenzó el aislamiento de todos los casos que se han ido detectando, así como de sus contactos.
El gobernador artemiseño, Ricardo Concepción Rodríguez, acotó que varias de las personas que se encuentran aisladas han resultado negativas al realizarles el estudio mediante la muestra PCR, no obstante, se mantienen ingresados para repetirles el examen en los próximos días y estar totalmente seguros de que no están contagiados con la enfermedad.
Refirió que en otros municipios donde se han detectado contactos de los 13 pacientes diagnosticados se ha iniciado una estricta vigilancia para prevenir mayores incidentes de contagio.
En el transcurso de la jornada de este miércoles, dijo que se han comenzado a adoptar medidas de refuerzo en los más diversos ámbitos. En horas de la tarde noche, aseguró, se puntualizarán en el lugar las acciones que es necesario poner en práctica para comenzar a aplicar la cuarentena en la zona afectada, variante que, de acuerdo con criterios del Consejo de Defensa Provincial y de especialistas del Ministerio de Salud Pública, es la mejor para cerrar y aislar el territorio, sobre todo por la gran movilidad que existe entre Bauta y La Habana.
El primer ministro Manuel Marrero Cruz valoró que en el estricto cumplimiento de las acciones que implica la cuarentena está la garantía de controlar la situación en la provincia, lo que a su vez es también una garantía para mantener estable la situación en el país.
De ahí su insistencia en aplicar dicha medida con total rigor. «Nadie entra ni nadie sale», adopten las medidas, como ya ustedes saben hacerlo, para garantizar los suministros y los servicios elementales, pero no puede haber excepciones para que no se nos vaya de la mano el asunto, indicó.
Mantener el aislamiento y evitar actividades que generen concentración de personas resulta vital en estos momentos, consideró. Como también lo es –dijo- informar constantemente a la población, de la cual se requiere total colaboración para contener la transmisión de la enfermedad.
Debido a la cercanía de Bauta con la capital del país, con la cual colinda en varios de sus municipios, en la provincia habanera también se adoptan estrictas medidas de control para prevenir posibles contagios que pudieran tener su fuente de infección a partir del referido evento de transmisión local.
Según detalló la vicegobernadora habanera Yanet Hernández Pérez, en estos momentos se continúan aplicando en varios municipios las acciones de reforzamiento y en los últimos días no se han confirmado nuevos casos en ninguno de los tres eventos de transmisión local que permanecen activos: dos en Centro Habana y uno en el Cerro.
Subrayó, además, que se presta especial atención al cumplimiento de los indicadores sanitarios establecidos por el Ministerio de Salud Pública. La situación que en la actualidad se manifiesta –especificó- nos pone en mejores condiciones para poder avanzar hacia la segunda fase de la etapa de recuperación.
Desde las provincias de Holguín, Santiago de Cuba y Guantánamo, sus respectivos gobernadores actualizaron a la dirección del país acerca del actual escenario epidemiológico que en ellas se vive y cómo se han ido consolidando en las últimas jornadas las medidas correspondientes a la tercera fase de la recuperación de la COVID-19.
En tal sentido, detallaron que la cotidianidad transcurre con tranquilidad y se continúan restableciendo actividades esenciales para la población como la totalidad de los servicios de salud, y otras asociadas al comercio, la gastronomía, el transporte, y los servicios de manera general. Se han continuado realizando las actividades diseñadas para el verano y se garantizan aquellas que permitirán el reinicio del curso escolar en septiembre.
Con prioridad se trabaja también en el seguimiento de las medidas de control epidemiológico, no solo vinculadas con la COVID-19 sino también a las arbovirosis; la pesquisa activa en las comunidades; la vigilancia y control de los viajeros; así como la atención a los sectores más vulnerables de la población.
Numerosos retos tiene aún Cuba por delante en medio del actual escenario que define su cotidianidad. De la responsabilidad y la disciplina de todos y cada uno de nosotros, dependerá cuán firmes puedan ser los pasos con que avancemos por esta nueva normalidad y así continuar cerrando caminos a la enfermedad.