Creció el empleo en Cuba
La Habana, 12 oct (RHC) Como señal alentadora en lo que a panorama del empleo respecta, Cuba –según datos al cierre de 2019– logró que por segundo año consecutivo, y tras un periodo de ligera y sostenida tendencia al decrecimiento (2015-2017), la ocupación creciera en 102 520 trabajadores.
El dato fue ofrecido esta semana por la ministra de Trabajo y Seguridad Social, Marta Elena Feitó, durante el chequeo del Programa de Empleo, Salario y Seguridad Social, que estuvo encabezado por el Presidente de la República Miguel Díaz-Canel Bermúdez y el primer ministro, Manuel Marrero Cruz.
En un encuentro que contó con otros dirigentes y con expertos del mundo laboral, la titular detalló que, con la cifra indicadora de crecimiento de la ocupación, Cuba alcanzó los 4 585 220 trabajadores, de los cuales 3 078 547 laboran en el sector estatal (67 %), y 1 506 673, en el sector no estatal (33 %).
Otro aspecto loable, según declaró la ministra, ha sido el aumento de la tasa de actividad en un 1,4 %, con lo cual el país alcanzó la cifra de un 65,2 % en ese indicador.
Durante el chequeo se pudo conocer, además, que según datos obtenidos al cierre de 2019, se mantuvo la estructura de trabajadores que laboran en los sectores presupuestado (48 %) y empresarial (52 %), relación que debe modificarse a partir del redimensionamiento del sector empresarial, proceso que está delineado como parte de la estrategia económica y social del país y de una futura etapa de perfeccionamiento de los organismos de la Administración Central del Estado.
Durante estos meses de pandemia de la COVID-19, una opción que ha resultado inevitable, como parte del necesario aislamiento social, lo ha constituido, como dijo Marta Elena Feitó, el trabajo a distancia.
Según analizó la titular en su exposición, las administraciones comenzaron a tomar conciencia sobre lo útil y necesario de esa modalidad; sin embargo, comentó, persisten problemas subjetivos que impiden mantener los resultados iniciales del trabajo a distancia. «Todavía hay muchos jefes que no quieren prescindir de la presencia física del trabajador», apuntó.
Para sustentar tal realidad desde las cifras, informó que de 624 978 trabajadores que al cierre de junio se desempeñaban en la modalidad del trabajo a distancia, solo se contaba con 334 779 al finalizar septiembre (el 11 % del total de trabajadores del sector estatal).
Se reconoció que también inciden factores objetivos como la falta de infraestructura tecnológica para laborar desde las casas. Por eso está incluida entre las metas la intención de fortalecer el cumplimiento de las normas de ciberseguridad y de un correcto tratamiento a la información que sea clasificada.
Sumando datos a lo hecho en esta temporada de pandemia, se supo que la cifra de trabajadores que interrumpieron sus labores se ha reducido, y que más del 30 % de los incluidos en ese grupo fueron reubicados en actividades como la producción de alimentos, las pesquisas de Salud Pública, la atención a personas vulnerables, adultos mayores solos o personas con alguna discapacidad, y labores en centros de aislamiento.
Como parte de la ampliación de las garantías salariales en estos tiempos difíciles, han sido protegidas más de 55 700 madres que han estado al cuidado de sus hijos menores, así como más de 19 300 trabajadores en condiciones de fragilidad de salud, y más de 10 500 que han estado en aislamiento preventivo.
Particular interés suscitó en el encuentro el anuncio, en voz de la titular, de que se encuentra en fase de exploración la idea de crear un Observatorio Social y Laboral. Al respecto, el Jefe de Estado destacó lo valioso que es el trabajo con las estadísticas nuestras, porque ellas posibilitan deducir tendencias y alertar sobre problemas que, si no se atienden tempranamente, se van complejizando.
Díaz-Canel resaltó que, desde el trabajo de Gobierno, las políticas públicas que puedan implementarse tienen mucho que ver con los temas de empleo, salarios, y de Seguridad Social. En tal sentido, reflexionó el Presidente cubano, aplicaremos políticas más robustas en la medida en que tengamos un apoyo también más robusto de estudios rigurosos.