Prensa Latina.
Washington, 27 jun (Prensa Latina) La caravana que comenzó este domingo su recorrido desde Miami, Florida, hasta la capital estadounidense, constituye una acción sin precedentes en la nación norteña contra el bloqueo a económico, comercial y financiero contra Cuba.
Carlos Lazo, coordinador del proyecto Puentes de Amor, dijo en declaraciones exclusivas a Prensa Latina que uno de los objetivos principales de esta campaña es exigirle al presidente Joe Biden, que cumpla sus promesas de campaña.
'Quienes votamos por Biden le exigimos que revise la política hostil arreciada por su antecesor, Donald Trump contra Cuba, y sea consecuente con quienes votamos por él con la esperanza de que haría un cambio sustancial en la política hacia nuestro país', señaló.
Más allá de cualquier otro objetivo, queremos salvar a nuestras familias y a la Patria, y lo vamos a lograr, y si en esta vida no pudiéramos, tendríamos otra para levantar estas sanciones y lograr una nación libre y soberana, agregó.
Lazo reiteró que él y sus seguidores recorrerán unos dos mil kilómetros hasta Washington D.C., y el 25 de julio se reunirán en la Plaza Lafayette, un monumento emblemático frente a la Casa Blanca, donde habitualmente los ciudadanos van allí a expresar demandas al gobierno estadounidense.
Explicó que el plan es durante todo el periplo pasar por iglesias, centros culturales y oficinas de congresistas 'para expresar nuestro deseo de que Biden reabra la embajada en La Habana, y que los norteamericanos puedan viajar a Cuba, que haya puentes de amor entre los dos pueblos'.
Los participantes demandarán, entre otras medidas, la reapertura de los servicios consulares de la embajada norteamericana en La Habana y levantar la prohibición de enviar remesas a la isla.
Según el coordinador de Puentes de Amor, los participantes en esta caravana exigirán además a la administración Biden la reanudación del plan de reunificación familiar suspendido por el gobernante republicano Donald Trump en 2017.
Los activistas pretenden también continuar con la recogida de fondos para la compra de jeringuillas y así apoyar la campaña de vacunación contra la Covid-19 en Cuba, porque el cerco de Washington limita el acceso de las autoridades sanitarias a los insumos médicos.
En este contexto, centenares de cubanoamericanos desfilaron este domingo en Miami, Florida, para pedir el fin del bloqueo contra la isla caribeña.
Al respecto, Lazo dijo que en una acción sin precedentes, los participantes caminaron por la emblemática Calle 8 y Brickell Avenue de Miami, así como por la carretera U.S.-1.
Según el activista cubanoamericano, durante todo ese recorrido la gente apoyó de manera entusiasta a los participantes y se hicieron eco de los pronunciamientos en contra de las sanciones unilaterales contra la nación antillana.
Desde hace varios meses en diversas ciudades del mundo cientos de personas realizan acciones para demandar el levantamiento de las sanciones recrudecidas incluso durante la pandemia de Covid-19.
El canciller de Cuba, Bruno Rodríguez, saludó este domingo el inicio de esta caravana en Estados Unidos para exigir al gobierno de ese país el fin del cerco a la nación antillana.
En su cuenta en Twitter, resaltó Rodríguez el empeño de cubanos y amigos que marchan desde Miami hasta Washington DC para, apuntó, tender Puentes de Amor y demandar el cese de políticas criminales que afectan a las familias en ambos países.
Las autoridades cubanas han reiterado en numerosas ocasiones que el bloqueo económico, comercial y financiero que mantiene Washington contra la isla desde hace más de seis décadas es el principal obstáculo al desarrollo del país y a la vez un impedimento sustancial para el establecimiento de una relación normal y civilizada con Estados Unidos.
La cancillería cubana también rechaza la inclusión de su país en la lista unilateral de Washington sobre naciones que no cooperan en la lucha contra el terrorismo o que supuestamente auspician ese flagelo.
Este miércoles, 184 de los Estados miembros de Naciones Unidas apoyaron una nueva resolución que pide levantar el cerco impuesto hace casi 60 años por Washington, mientras Estados Unidos e Israel votaron en contra y quedaron aislados ante el reclamo de la mayoría de la comunidad internacional.