La Habana, 26 ago (RHC) La creación del Instituto de Información y Comunicación Social constituye un paso decisivo para la gestión del nuevo sistema comunicativo en Cuba, dijeron en el programa Mesa Redonda integrantes del grupo de trabajo que participaron en la elaboración del decreto ley 41, que dio paso a este organismo de la administarción central del Estado.
Entre las funciones que se proponen para esta entidad se encuentran la dirección metodológica de la comunciación institucional, la coordinación de la política de investigaciones, la superación profesional y la gestión de la marca país, dijo Onelio Castillo, integrante del equipo de trabajo y hasta ayer vicepresidente del extinto Instituto Cubano de Radio y Televisión.
Aclaró el directivo que los sistemas de la radio y la televisión continuarán con su labor y las transformaciones que en ellos ocurran serán de forma gradual y en correspondencia con las normas jurídicas complementarias que acompañan el decreto ley 41 y la Política de Comunicación del Estado y el Gobierno, aprobada en 2018.
Humberto Fabián Suárez, vicepresidente primero de la Asociación Cubana de Comunicadores Sociales, dijo que en los próximos días el Consejo de Ministros aprobará las propuestas que se han realizado para este Instituto respecto a su estructura, funciones, expresión en municipios y provincias y está previsto que en febrero de 2022 se apruebe un decreto ley sobre la Comunicación Social en Cuba.
Señaló que el organismo, con rango de ministerio, tiene que ver con necesidades perentorias de la comunicación en Cuba como el aseguramiento material y económico de los medios, la articulación entre la comunicación institucional, mediática y comunitaria, la lucha contra el secretismo y la construcción de la imagen de país.
Agregó que como parte del proceso que se desarrolla en el país desde 2013 para transformar este sector se realizó una exhaustiva investigación documental sobre las normas jurídicas que se han establecido en el mundo y en Cuba con anterioridad, así como también un diagnóstico sobre la situación real de la comunicación en la nación con la participación de medios e instituciones.
Castillo subrayó como resultados de este diagnóstico la existencia de una comunicación unidireccional, que no se consideraba este componente como un elemento estratégico en la dirección y la ausencia de normas jurídicas que respaldaran los conceptos y acciones definidos por el Partido Comunista de Cuba en sus sucesivos congresos.
El Consejo de Estado de Cuba, mediante el Decreto-Ley 41/2021, dispuso la creación del Instituto de Información y Comunicación Social, que tiene la misión de conducir y controlar la Política de la Comunicación Social del Estado y el Gobierno.
(Cubasi)