La Habana, 25 ene (RHC) La Revolución cubana sigue siendo hoy el faro que nos ilumina en la lucha por un mundo mejor, aseveró el presidente de la Casa de Amistad entre Argentina y Cuba, en Buenos Aires, Rubén Zaccaro.

Durante un acto por el aniversario 66 del triunfo del 1 de enero de 1959, Zaccaro resaltó los lazos que unen a ambos pueblos y el legado de figuras como el líder histórico Fidel Castro (1926-2016) y el Héroe Nacional del país caribeño, José Martí (1853-1895).

Estamos en una etapa de lucha. No nos dejemos angustiar por las vicisitudes que vivimos. Cuba continúa demostrándonos que se puede enfrentar a un imperio y que es posible cambiar las cosas, afirmó.

Por su parte, el segundo jefe de la misión diplomática cubana en Argentina, Leonardo Baster, agradeció el apoyo del Movimiento de Solidaridad de esta nación a lo largo de los años y los esfuerzos realizados para lograr que la mayor de las Antillas fuera excluida de una lista estadounidense de supuestos patrocinadores del terrorismo.

Menos de una semana después de la decisión del expresidente Joe Biden, el nuevo mandatario (Donald Trump) volvió a incorporarnos a ese espurio listado. Aunque injustificado, eso no nos tomó por sorpresa y en ningún momento lo asumimos como una derrota. La Revolución, desde su triunfo, enfrentó las agresiones de Estados Unidos, pero la palabra rendición no existe para nosotros, aseveró.

No hay ningún argumento que justifique esa medida. Por el contrario, mi país fue víctima del terrorismo que se extendió más allá de sus fronteras y como parte del cual fueron asesinados funcionarios y diplomáticos como Jesús Cejas y Crescencio Galañena aquí en Argentina, añadió.

Además, señaló que el objetivo de Washington es continuar con el viejo anhelo de derrocar al proceso revolucionario y profundizar el bloqueo económico, comercial y financiero impuesto hace más de seis décadas.

Pese a que algunos promueven la violencia y el odio, nosotros seguiremos defendiendo el amor y la hermandad entre los pueblos, así como los valores que nos identifican. No debemos rendirnos. El enemigo nos amenaza a toda hora porque tiene miedo de nuestras ideas y de lo que somos capaces de lograr. Seguiremos luchando con el ejemplo de quienes dieron la vida por una causa justa, concluyó. (Fuente: Prensa Latina)