La Habana, 17 may (RHC) El ministro español de Asuntos Exteriores en funciones, José Manuel García-Margallo, dijo este lunes en La Habana que fue "excelente", "extraordinariamente familiar" y de gran "cordialidad" la reunión que él y la titular de Fomento, Ana Pastor, tuvieron con el presidente de Cuba, Raúl Castro.
"Recuerdo pocas visitas o pocas entrevistas a este nivel en que haya habido una cordialidad como la que ha habido ahora. Subrayando que es obvio que somos ministros, y que nos reciba un Jefe de Estado no es lo que el protocolo exige. Es más bien muestra de un gesto especial hacia España de las autoridades cubanas", destacó.
En rueda de prensa junto a la ministra de Fomento, García-Margallo valoró muy positivamente su visita a Cuba y destacó que "culmina cuatro años de trabajo de aproximación" entre España y la nación caribeña.
En su opinión esta visita, que tuvo como colofón la reunión con Raúl Castro, "marca un antes y un después que tiene que ser ahora aprovechado para robustecer nuestras relaciones económicas, comerciales y de cooperación".
Los ministros de Exteriores y de Fomento se reunieron durante dos horas y media con el presidente cubano y, según García-Margallo, hablaron "de todo": de las relaciones bilaterales, la situación de la Unión Europea y de Latinoamérica y "de cómo están los asuntos del mundo".
Un encuentro que se desarrolló, insistió, "desde la complicidad y cordialidad que debe haber entre dos Gobiernos como los nuestros".
El jefe de la diplomacia española recordó que en Cuba se ha abierto una nueva era "en muchos frentes: con Estados Unidos, con la Unión Europea. Y lo que ha hecho España es aprovechar esos dos cambios importantes para establecer una nueva era con Cuba".
"Las cosas han cambiado a una gran velocidad, esto abre unas oportunidades nuevas y (...) Espero que haya una nueva era entre Cuba y España, porque la hay con Estados Unidos y la Unión Europea".
Preguntado si Raúl Castro ha planteado invitar al rey de España a visitar Cuba, García-Margallo respondió: "Lo único que nos ha dicho el presidente Castro cuando nos ha enseñado el Palacio de la Revolución (lugar de la reunión) es en qué sitio se produciría el saludo cuando viniese el rey o el presidente del Gobierno. Y a buen entendedor pocas palabras bastan".