Roma, 26 sep (RHC) Expertos en Italia instan a la vacunación temprana ante la detección anticipada del primer virus de influenza, enfermedad contagiosa que se teme que pueda afectar a seis millones de personas en la temporada invernal 2019-2020.
El germen de la influenza estacional fue aislado por investigadores de Parma, ciudad universitaria situada en la norteña región de Emilia-Romaña, en una niña de seis años.
Se trata de un virus B, uno de los cuatro que circulará la próxima temporada, considerado entre los menos dañinos, aclaran los expertos.
El flamante presidente de la Sociedad Italiana de Terapia Antiinfecciosa, Matteo Bassetti, citado por Corriere della Sera y otros medios, informó que los virus en circulación en la próxima temporada serán cuatro, dos de tipo A (A-H1N1 y A-H3N2) y dos del B (B Colorado y B Phuket) y que las vacunas disponibles, elaboradas a partir de las indicaciones de la Organización Mundial de la Salud deberán proteger contra su agresión.
Los pronósticos apuntan a que la cifra de personas afectadas por la enfermedad será similar a años anteriores y el temor se concentra en la agresividad del virus A-H3N2, el cual funciona en sinergia con una bacteria, el neumococo, que causa complicaciones pulmonares y que puede ser más dañino en los ancianos.
La aparición en septiembre, cuando todavía las temperaturas son bastante altas, de la primera cepa de influenza hace suponer que la epidemia se anticipará y su evolución estará condicionada al frío persistente que por lo regular ocurre en diciembre.
En tal caso los expertos recomiendan realizar la vacunación, programada a partir de la segunda quincena de octubre, sin dilación sobre todo en casos de niños y ancianos,considerados más vulnerables.
Aclaró asimismo que existen al menos otros 262 tipos de virus activos en estos momentos y que provocan síntomas similares, quizás un poco más leves, derivados entre otros factores por cambios de temperatura.
Igual alertó sobre el inadecuado uso de antibióticos ante una enfermedad viral como la gripe, los cuales no solo son inútiles sino produce daños colaterales.
Las bacterias, gracias a un uso acrítico de esos fármacos, son cada vez más resistentes, provocando una verdadera emergencia médica mundial. (Fuente: PL)