George Keays es un paciente estadounidense diagnosticado de cáncer que apostó por Cuba en la decisión de tratar su enfermedad, y ahora cuenta su historia en el programa “Nova” de PBS. Keays no está seguro de si será arrestado o multado después de haber dado su testimonio en el especial de “Nova”.
Un documental sobre las investigaciones de Cuba en los tratamientos para los enfermos de cáncer ha sido transmitido por el canal público PBS de los Estados Unidos. En un espacio televisivo sobre ciencia llamado “Nova”, se explica cómo Keays y otros, han encontrado ayuda en una pequeña isla.
La historia narrada por Keays, cuenta cómo este paciente fue diagnosticado con cáncer de pulmón en estadio 4 en 2015. Las estadísticas muestran que las personas con cáncer de pulmón en estadio 4 tienen entre un 2 y un 13% de posibilidades de sobrevivir durante al menos cinco años después del diagnóstico.
A Keays le dijeron que tenía entre seis y nueve meses de vida. Decidió correr el riesgo a pesar de la ley que prohíbe a los norteamericanos viajar a Cuba y del escepticismo de sus médicos.
“He tenido oncólogos que, en cierto modo, levantaron la ceja y dijeron:" Hmm, no estoy seguro de que funcione”. Y luego está la definición de lo que significa" trabajar”, dice Keays. “Si las personas esperan una cura completa, nunca volverás a tener cáncer, ese no es realmente el caso”.
La razón por la que Keays no era tan escéptico como sus médicos llegaron a través de la investigación. Lo que encontró con respecto a lo que estaba sucediendo en Cuba tenía mucho sentido para él y estaba convencido de que tenía que hacer algo diferente.
Según cuenta este paciente, las vacunas cubanas ralentizan la enfermedad hasta un punto en que te permite lidiar con ella. “Cuando usted tiene cáncer terminal en etapa 4, por supuesto, desea curarlo, pero eso no está disponible. Así que miras cualquier terapia que creas que puede darte cinco meses, seis meses, nueve meses”. Tal reflexión hizo a Keays viajar a Cuba.
Cuba se ha convertido en un lugar de esperanza para las personas con cáncer gracias al bloqueo de los Estados Unidos, donde los obstáculos les obligaron a ser más creativos. Hoy, el Centro de Inmunología Molecular (CIM) de Cuba en La Habana es uno de los principales desarrolladores de vacunas contra el cáncer, tratamientos que no están disponibles en los Estados Unidos por el embargo comercial de larga data.
Llewellyn Smith, la escritora y directora del especial, se sorprendió al descubrir que no solo los médicos cubanos han podido avanzar en la batalla contra el cáncer, sino también que su trabajo se está compartiendo en todo el mundo.
“El más grande, tipo de revelación, es que tenemos la impresión de que Cuba es bastante atrasada, bastante tecnológica, bastante inmadura. Pero el resto del mundo y yo estoy hablando de otros países de Sudamérica, Europa respeta los valores de la ciencia cubana y es muy respetuoso con eso”, dice Smith.
Keays agrega: “He tenido mucha, mucha suerte. Tengo cáncer, pero me siento muy bendecido de estar en la posición en la que estoy ahora. No sé a dónde van las cosas. No sé cuánto tiempo estaré aquí, pero sé que, por ahora, este camino es el correcto para mí”.
Cuba se ha convertido en un lugar de esperanza para las personas con cáncer a partir de que Estados Unidos impuso un embargo comercial a Cuba. Eso dejó al país aislado de los recursos médicos, por lo que los médicos cubanos se vieron obligados a ser creativos.
Hoy, el Centro de Inmunología Molecular de Cuba en La Habana es uno de los principales desarrolladores de vacunas contra el cáncer, tratamientos que no están disponibles en los Estados Unidos gracias al embargo comercial de más de 60 años.
Llewellyn Smith, escritora y directora de este programa, quedó sorprendida al descubrir que no solo los médicos cubanos han podido avanzar en la batalla contra el cáncer, sino también que su trabajo se está compartiendo en todo el mundo y los Estados Unidos están fuera de eso.
Ninguna compañía de seguros pagará un viaje a Cuba para un tratamiento contra el cáncer. Pero, el costo del tratamiento en Cuba es aproximadamente el 5% de lo que cuesta en los Estados Unidos.
El Dr. Kelvin Lee, del Centro Integral de Cáncer Roswell Park, dice: “El desafío de la inmunoterapia en los Estados Unidos es que funciona y estamos curando a las personas, pero el tratamiento cuesta cientos de miles de dólares”. (Fuente: Cubadebate).