por María Josefina Arce
Como parte del largo proceso de normalización de las relaciones entre Cuba y Estados Unidos se restablecieron este miércoles los vuelos regulares entre ambas naciones, con la llegada al aeropuerto de la ciudad de Santa Clara, en el centro del archipiélago, de un avión de la aerolínea JETBLUE procedente de Florida.
De histórico ha sido calificado por ambas partes la reanudación de los vuelos, suspendidos por más de 50 años y que se inscribe en el memorando suscrito en febrero pasado y que establece también la conexión aérea desde territorio cubano hacia el norteamericano.
A bordo del Airbus A320 viajaron 150 pasajeros, entre los que se contaba el secretario norteamericano de Transporte, Anthony Foxx.
JETBLUE ha sido la pionera en estos vuelos, pero no será la única pues desde este jueves comenzaron los trayectos comerciales de la aerolínea Silver Airways, también a Santa Clara, mientras que American Airlines volará a partir del 7 de septiembre a las ciudades de Holguín y Cienfuegos.
La Habana, uno de los destinos más deseados se hará esperar aún un tiempo, ya que todavía están en proceso de aprobación final las licencias para operar vuelos a la capital cubana.
Se prevén un total de 20 vuelos diarios de ida y vuelta a La Habana una vez se establezca el solicitado servicio, que se unirán a los 90 viajes al resto de los aeropuertos cubanos habilitados.
Pero a pesar de la buena noticia no podemos olvidar que todavía los ciudadanos norteamericanos no podrán viajar a Cuba como turistas, a causa del entramado de leyes que impone el injusto y unilateral bloqueo de Estados Unidos contra Cuba.
Para poder conocer la Mayor de las Antillas y sus grandes avances en diversas áreas, así como su rica historia y sus costumbres, los estadounidenses tendrán que incluirse en una de las doce categorias que permiten su viaje a territorio cubano.
La directora de Aeropuertos Internacionales de JETBLUE, Giselle Cortés, reconoció recientemente a la prensa cubana que el bloqueo constituye un reto para las operaciones de su empresa.
Como era de esperar el reinicio de los vuelos regulares entre las dos naciones también ha sido atacado abiertamente en Estados Unidos por parte de sectores opuestos al cambio de política de la Casa Blanca, una política obsoleta y fracasada.
La supuesta falta de seguridad e infraestructura en los aeródromos cubanos han sido los puntos que han centrado estos injustificados ataques, pues como bien asegurara Eduardo Rodríguez Dávila, viceministro de Desarrollo del Ministerio del Transporte de Cuba, el país posee fortalezas en materia de seguridad operacional y seguridad de la aviación, que son reconocidas internacionalmente.
Sin dudas las dos naciones han dado un paso importante en el largo y complejo proceso de normalización de las relaciones bilaterales desde diciembre de 2014 cuando se hizo el anuncio de un acercamiento bilateral, pero aún persisten obstáculos que impiden avanzar aún más como el bloqueo, condenado mundialmente.