Compleja recta final en comicios franceses

Editado por Maria Calvo
2017-04-17 10:38:39

Pinterest
Telegram
Linkedin
WhatsApp

por Guillermo Alvarado

Cuando faltan apenas 8 días para la primera vuelta de las elecciones presidenciales y legislativas en Francia, la recta final de la carrera hacia el Palacio del Elíseo se ha complicado pues cuatro de los 11 aspirantes tienen posibilidades reales de estar entre los dos que pasarán a la ronda definitiva del 7 de mayo.

Hace apenas un par de semanas el camino parecía claro pues Marine Le Pen, del ultra derechista Frente Nacional, y Enmanuel Macrón, de la recién fundada agrupación de centro derecha En Marcha, eran los contendientes seguros para la presidencia.

Sin embargo en los últimos día hubo una escalada sorprendente en los sondeos de intención de voto de Jean-Luc Mélenchon, de la coalición de izquierda Francia Insumisa, quien luego del debate televisivo del 20 de marzo subió entre seis o siete puntos, según las diferentes casas encuestadoras.

En ese evento Mélenchon fue calificado como el más convincente de los candidatos a la presidencia, con ideas claras de cómo sacar al país del estancamiento económico que vive hace años, estimular la producción y otorgar claros beneficios a los trabajadores, que fueron conculcados durante los últimos gobiernos.

El político de izquierda ocupa ya el tercer lugar, con 19 puntos, según el Instituto Francés de Opinión Pública, por debajo de Macrón, con 23, y Le Pen, que alcanza 24%. En la cuarta posición se encuentra el conservador François Fillon, que perdió mucho apoyo tras un escándalo por presunta corrupción, y está estancado con 18,5% en la intención de voto.

Con casi el 30 por ciento de indecisos y los márgenes de error de las encuestas, cualquiera de los cuatro podría pasar a la segunda vuelta, lo cual da lugar a las más variadas especulaciones, entre ellas un eventual enfrentamiento entre Mélenchon y Le Pen, un horizonte que pondría en serios aprietos a la derecha y centro-derecha.

Lo cierto es que el candidato de la Francia Insumisa no ha parado de sumar adhesiones con una propuesta que incluye el aumento del salario mínimo, sexta semana de vacaciones al año, 32 horas de trabajo semanales, jubilación a los 60 años, nacionalizaciones, anulación de una parte de la deuda y la creación de empleos públicos para reducir el paro, que afecta a seis millones en total.

En una sociedad desilusionada y cada vez más escéptica hacia los políticos, estas promesas están calando profundamente.

El único que parece fuera de toda posibilidad es el representante del gubernamental Partido Socialista, Benoit Hamon, quien no logra convencer ni a sus propios partidarios y aparece con un escaso nueve por ciento de apoyo.

Viene ahora un largo fin de semana, con el feriado de Pascuas el lunes, cuando sin duda alguna todos los partidos y sus candidatos van a acelerar a fondo y no existe margen para cometer errores, que podrían costar la descalificación en una de las finales más complicadas e inciertas en la historia política de la llamada Quinta República francesa, inaugurada en 1958 por Charles De Gaulle.

Hay una frase muy repetida en el idioma francés, “on verra”, ya veremos, en español, y eso es lo que cruzará por la mente de muchos franceses y no pocos europeos durante toda la semana próxima.



Comentários


Deixe um comentário
Todos os campos são requeridos
Não será publicado
captcha challenge
up