Por Nicanor León Cotayo
Nuevas señales advierten que prosigue complicándose la gestión del presidente Donald Trump al frente de la Casa Blanca.
Ello parece asomar de lo escrito este martes por el corresponsal de la Associated France Press (AFP) en Washington, Aldo Gamboa.
Según afirmó, la multiplicación de denuncias contra Trump por supuestas revelaciones a diplomáticos rusos y su intento de presionar al FBI, centraban las atenciones este miércoles sobre el Congreso.
¿Motivo?, “En búsqueda de una salida al cuadro de crisis permanente”.
Al respecto el jefe de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, declaró que no deben centrarse en especulaciones, pues aquí hay una clara política en juego.
“Seguiremos los hechos a cualquier lugar que nos conduzcan”, añadió el legislador republicano en conferencia de prensa.
El periodista Aldo Gamboa comentó que los integrantes del bando republicano en ambas Cámaras del Congreso se encuentran bajo “intensa presión” para que se manifiesten sobre las denuncias contra el presidente.
Gamboa recordó que este avanza por su cuarto mes de mandato, en el centro del fuego cruzado por episodios controvertidos en la Casa Blanca.
Pero luego agregó: “Trump no parece capaz de colocar su administración sobre rieles”.
Junto a ello mencionó que el nuevo capítulo de la crisis estalló siete días atrás, cuando el mandatario sacó de su puesto al jefe del FBI, James Comey.
Prosiguió a la mañana siguiente, añadió Gamboa, en ocasión de que se reunió en el Salón Oval con el canciller ruso, Serguéi Lavrov.
Esa secuencia adquirió una perspectiva explosiva, subrayó, porque Comey conducía en el FBI una pesquisa sobre la no demostrada interferencia de Moscú en las elecciones presidenciales de 2016.
Pero lo peor, advirtió el corresponsal Gamboa, estaba por venir: el lunes la prensa estadounidense dijo que en su diálogo con Lavrov, Trump le reveló informaciones de inteligencia (top secret).
En una nueva y peligrosa vuelta de tuerca, el martes, The New York Times afirmó poseer un memorando de Comey donde afirma que Trump intentó cerrar una delicada investigación del FBI.
Sobre el general Michael Flynn, entonces asesor del presidente para Seguridad Nacional.
Rusia negó que Trump haya entregado cualquier información reservada a Lavrov, y Vladimir Putin señaló que en Washington existía un clima de “esquizofrenia política”.
Es en este escenario de caos, desconfianza generalizada y denuncias cruzadas, opinó Associated France Press, es que medios estadounidenses pusieron la mira sobre el Congreso.
Y esto, agregó por su lado el diario The Washington Post, cuando lo único que se escucha en el Capitolio “son los grillos”.
Pero historiadores que siguen los pasos a la actual crisis no han desterrado el término Watergate a la hora de formular sus análisis.
Muy distinto, han hecho notar que fue el gran escándalo donde sucumbió en 1974 la presidencia de Richard Nixon.
Ahora la interrogante más en boga circulando en Washington reza: ¿Está comenzando el principio del fin para Donald Trump?
(Tomado de Cubasí)