Por María Josefina Arce.

El pueblo cubano mira al presente, pero también al futuro y así lo refleja el proyecto de la nueva constitución, que será sometido a consideración de los ciudadanos el próximo 24 de febrero, en una fecha emblemática de la historia de la nación.

Aquel 24 de febrero de 1895 se dio continuidad a la lucha por la independencia de Cuba de la metrópoli española, de ahí la significación de que precisamente en esa fecha, ciento 24 años después el pueblo cubano soberano e independiente se pronuncie por la ley de leyes que regirá el destino de su Patria.

Ya se ultiman los detalles para tan importante jornada, que estará apoyada por más de 420 mil cubanos para garantizar el éxito del referendo sobre la nueva Constitución.

De acuerdo con la presidenta de la Comisión Electoral Nacional, Alina Balseiro. la cifra incluye a las autoridades electorales, los colaboradores y muy importante, a los pioneros, niños de la enseñanza primaria y secundaria, quienes son los encargados de cuidar las urnas, un aspecto que distingue a nuestra democracia participativa.

Mil cincuenta y un colegios electorales se habilitarán en 120 países, pues el derecho a pronunciarse sobre el nuevo documento está garantizado para todos los cubanos, así cumplan misiones oficiales en el exterior, sean colaboradores o estén en alguna beca en el extranjero.

Ya han sido colocadas en sitios públicos las listas de electores, un detalle esencial que distingue a nuestro sistema electoral, transparente, confiable, automatizado y totalmente auditable.

Más de ocho millones de cubanos están convocados a ratificar la carta magna aprobada el pasado 22 de diciembre por la Asamblea Nacional del Poder Popular, tras meses de consulta popular, en la que todo cubano pudo libremente expresar sus opiniones y sugerencias.

El resultado es un proyecto de constitución acorde con las transformaciones que vive la Mayor de las Antillas, pero que mantiene su esencia humanista y garantiza los más elementales derechos humanos a cada ciudadano.

Así ha sido reconocido por personalidades y organismos internacionales. Arie Hoekman, representante del Fondo de Población de la ONU en México y director de país para Cuba y República Dominicana, reconoció los valores de la nueva Carta Magna.

El funcionario destacó que Cuba se encuentra inmersa en una reforma constitucional que ha otorgado particular importancia al ejercicio de los derechos de todas las personas, un elemento esencial en el camino del desarrollo.