Por: María Josefina Arce

El próximo primero de marzo entrará en vigor en Bolivia el SUS, Sistema Único de Salud, que busca de manera gratuita y calidad extender a toda la población la atención sanitaria.

Aunque el gobierno del presidente Evo Morales ha trabajado incansablemente por llevar la salud sin costo alguno a todos los sectores, hasta el momento, amparados en la Ley de Salud Integral, tenían acceso a la atención médica gratuita las embarazadas, niños, adultos mayores y discapacitados.

El SUS beneficiará a cinco millones 600 MIL ciudadanos que no tenían seguro de salud y que por razones económicas no podían atenderse por la vía privada.

Es así que la nueva ley favorecerá a campesinos, indígenas, gremialistas, choferes, trabajadoras del hogar, artesanos y personas que laboran en otros sectores informales que se encontraban excluidas de un seguro de salud gratuito.

De gran impacto social, la medida ha sido acogida favorablemente y ya más de un millón de bolivianos se han inscripto, mientras que miles de profesionales de la salud manifestaron su disposición de apoyar el SUS.

El gobierno boliviano destinará en un inicio unos 200 millones de dólares para el SUS, que cumple con lo estipulado en la Constitución, la cual reconoce a la salud como un derecho humano.

También se invertirán otros 2.000 millones de dólares para la construcción de hospitales, entre otras medidas encaminadas a fortalecer equipamiento y recursos humanos dentro del sistema de atención.

Para la OMS Y OPS, Organizaciones Mundial y Panamericana de la Salud, con el SUS el país andino se encamina hacia la salud universal, uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

Los organismos internacionales han destacado los logros de Bolivia en esa esfera, posibles gracias a los programas sociales puestos en marcha por el gobierno del presidente Evo Morales para llevar la atención médica a cada rincón de la nación.

Así tenemos la iniciativa piloto “Mi salud”, implementado en 2013, y que ya se extiende a más de 300 municipios bolivianos.

Millones de consultas gratuitas han realizado los profesionales incorporados a este programa, que tiene como eje brindar asistencia a la población más necesitada casa por casa y en consultorios vecinales.

El programa del bono Juana Azurduy ha tenido también un gran impacto social, pues beneficia a las mujeres embarazadas y busca reducir la mortalidad materno-infantil.

Bolivia destaca en América Latina como un país que durante la última década ha trabajado intensamente por mejorar los índices sanitarios y cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, lo que es reconocido en el plano interno por sus ciudadanos y a nivel internacional por organismos, personalidades y gobiernos.