Colaboración rusa con Cuba es esencial en todos los órdenes, incluyendo la energía

Editado por Maite González Martínez
2019-10-07 07:49:02

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Dmitri Medvedev, Primer Ministro de Rusia, durante la inauguración de una Planta de extracción de petróleo en Boca de Jaruco, Cuba. Foto: Ismael Francisco/ Cuba

Por: Roberto Morejón

Muy constructiva resultó la reciente visita a Cuba del primer ministro de Rusia, Dimitri Medvedev, por la tipificación de posiciones comunes y la perspectiva de desarrollo de proyectos, entre ellos en la esfera energética.

El jefe de gobierno ruso tuvo intervenciones públicas de mucho relieve, con repercusión internacional, y respaldó las demandas de Cuba del cese del bloqueo de Estados Unidos.

Medvedev, además, convalidó la rúbrica de 8 acuerdos en esferas clave como agricultura, altas tecnologías, avance digital y energía.

En ese último ámbito sobresale el impulso a un plan para la sostenibilidad de yacimientos de petróleo en Boca de Jaruco, en la occidental provincia cubana de Mayabeque.

El propósito reafirmó su pujanza con la presencia allí de Medvedev, quien comprobó el comienzo de la perforación de un pozo horizontal en el lugar.

La labor corre a cargo de la bien evaluada empresa rusa Zarubezneft, junto a su homóloga local Cubapetróleo.

La colaboración con esa entidad data de hace algunos años, pero amplía sus horizontes a partir de la asistencia técnica de Rusia.

Zarubezhneft procura hacer más eficiente la producción del llamado oro negro en Cuba.

Si bien el proyecto de Boca de Jaruco aún está en la etapa de exploración geológica, en el futuro podrían perforarse varios pozos.

Aumentar los rendimientos de todos los puntos de extracción también constituye un objetivo de Cuba y para lograrlo requiere de técnicas más sofisticadas, como las de Rusia.

Es oportuno consignar que la nación caribeña le otorga gran importancia a la perforación horizontal como la aplicada en Boca de Jaruco.

Se trata de una tecnología que permite explotar desde la costa el crudo bajo el mar y abaratar los costos de inversión.

El respaldo de Rusia a los planes de prospección y para hacer más eficientes los pozos petroleros activos representa un aliento notable para este país caribeño.

Aquí es necesario mantener la producción de un tipo de hidrocarburo fundamentalmente pesado que cubre entre 40-45 por ciento de los requerimientos nacionales.

El archipiélago caribeño solventa el resto de sus apremios con compras en el exterior, una parte de ellas en Venezuela.

Los antillanos sostienen con esa nación un provechoso acuerdo con alcances en la salud y otros frentes.

Pero la administración estadounidense con sanciones brutales atenta contra la economía de Venezuela y persigue los envíos de energéticos hacia Cuba.

La patria de José Martí resiste el frenético acoso estadounidense y procura asegurar y hacer más competitiva su producción doméstica de crudo, en este último caso con el respaldo significativo de Rusia.



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