Por María Josefina Arce (RHC)

“…el bloqueo es tan cruel y tan injusto que constituye un genocidio. El intento de rendir por hambre y por enfermedad a un país es un gran crimen de carácter masivo, y debe ser prohibido, condenado y juzgado como tal”, sentenció el líder de la Revolución cubana, Fidel Castro (1926-2016).

Y en la sede de la ONU en Nueva York, múltiples fueron las voces que se escucharon este miércoles 6 de noviembre, en contra de esa hostil política que mantiene Estados Unidos desde hace más de medio siglo contra Cuba y que cercena los más elementales derechos humanos de todo un pueblo.

De nada valieron las presiones estadounidenses, denunciadas por Cuba. En conferencia de prensa horas antes, el canciller Bruno Rodríguez afirmó que lejos de atender al reiterado llamado de la comunidad internacional que durante más de dos décadas ha adoptado esta resolución de manera prácticamente unánime, Estados Unidos realiza maniobras adicionales para dificultar su adopción.

Sin embargo, más de una treintena de oradores condenaron en esta jornada el cerco económico contra Cuba, en el debate del proyecto cubano de Resolución sobre la necesidad de poner fin a esa unilateral medida, reforzada bajo la administración del presidente Donald Trump, ocasionando en el período de abril de 2018 a marzo del actual año, pérdidas por más de cuatro MIL MILLONES de dólares.

El Grupo Africano subrayó que el bloqueo niega la aspiración colectiva de defender las ideas y los principios del multilateralismo, como se prevé en la carta de las Naciones Unidas.

Al intervenir en nombre del Grupo de los 77 más China, el representante de Palestina en la ONU, se refirió a cómo la actual administración norteamericana intenta solidificar el cerco económico, comercial y financiero contra Cuba, y pidió a la comunidad internacional intensificar esfuerzos para levantar ese mecanismo hostil.

La CARICOM, Comunidad del Caribe, fue categórica cuando afirmó que Cuba no es una amenaza para nadie, y resaltó las décadas de cooperación que ha mantenido en educación, salud y enfrentamiento a desastres naturales con el resto de las naciones caribeñas, de las cuales, dijo, forma parte importante.

El MNOAL, Movimiento de Países No Alineados, volvió a reiterar su rechazo al bloqueo, que calificó de injustificado, al tiempo que llamó a respetar la Carta de la ONU y sus principios de no injerencia en los asuntos internos de otras naciones.

Muchos otros países como Rusia, Venezuela, Nicaragua, Angola, México, India, Belarús dejaron bien clara en la jornada de este miércoles su postura en contra de una medida de marcado carácter extraterritorial.

Los oradores coincidieron que el bloqueo representa un freno para el desarrollo de todas las potencialidades de la economía cubana, para la implementación del Plan Nacional de Desarrollo Económico y Social del país, así como para la consecución de la Agenda 2030 y sus Objetivos de Desarrollo Sostenible.

Este ha sido el reclamo que se ha escuchado a lo largo de estos meses en diversos eventos internacionales. Ya en el segmento de alto nivel del septuagésimo cuarto período de sesiones de la Asamblea General, en septiembre pasado, fueron varios los jefes de estado y de gobierno que se pronunciaron contra esa irracional política.

En contra del cerco económico y de su carácter extraterritorial hablaron los presidentes de Costa Rica, Namibia, Chad. Burkina Faso, Bolivia y Angola, entre otros.

Con anterioridad en Bakú, la capital de Azerbaiyán, el Movimiento de Países NO Alineados en su décimo octava Cumbre de jefes de estado y de gobierno reclamó el cese del bloqueo económico, comercial y financiero que ejerce Washington contra Cuba.

La hostil política de Estados Unidos constituye una violación masiva, flagrante y sistemática de los derechos humanos de todas las cubanas y cubanos y va contra el deseo de la gran mayoría de la sociedad estadounidense que pide su fin.

Como quedó claro nuevamente en la Asamblea General de la ONU, es hora de que Estados Unidos cumpla con las 27 resoluciones adoptadas por la comunidad internacional y ponga fin, sin condicionamiento alguno, a su política de bloqueo contra Cuba.