El Gobierno de Cuba confirmó que aún, en medio del complejo panorama, se trabaja por
la recuperación de la economía. Foto: Archivo/RHC
Por María Josefina Arce (RHC)
La marcha de la economía cubana ocupó buena parte de la atención y análisis de los diputados en el VII periodo ordinario de sesiones de la IX legislatura de la Asamblea Nacional del Poder Popular de Cuba, que sesiona en La Habana.
La economía del país se ha visto seriamente afectada por los impactos de la COVID-19 que ha requerido destinar millonarias cifras al combate de la enfermedad causada por el nuevo coronavirus para proteger la salud de la población, una prioridad de las autoridades.
En medio de esta compleja situación sanitaria, ha incidido con brutal fuerza el bloqueo norteamericano, recrudecido en estos tiempos de pandemia. El actual gobierno de Estados Unidos mantiene invariable las 243 medidas adoptadas por la anterior administración, presidida por Donald Trump (2017-2021).
Esto ha privado a la Mayor de las Antillas de los vitales ingresos en divisas para continuar avanzando y dar la debida respuesta a las necesidades básicas de los ciudadanos.
El recrudecimiento del bloqueo ha llevado a muchos bancos a declararnos como un país de riesgo. Esta persecución financiera contra Cuba impide transacciones internacionales y afecta a la ciudadanía.
Para que se tenga una idea de los daños ocasionados, solo en 2020 la nación caribeña dejó de ingresar 2 MIL 400 millones de dólares.
La economía cubana ha perdido 13% de su Producto Interno Bruto entre el año 2020 y lo que va del presente. Un impacto calificado de duro por el viceprimer ministro y titular de Economía y Planificación, Alejandro Gil, quien señaló que es imposible que esta situación no se sienta en la vida diaria de los cubanos.
No obstante, el país está empeñado en continuar su avance, sobre todo en la producción de alimentos, que hoy, afirmó Gil (en la foto), enfrenta un complejo panorama, ante el déficit de insumos, combustible y piezas y equipamiento, pero también de problemas organizativos que no se pueden obviar.
Para lograr ese crecimiento, aspiración de todos, se han venido adoptando una serie de medidas, encaminadas a eliminar trabas en los procesos económicos y la implementación de los Lineamientos de la Política Económica y Social del Partido Comunista de Cuba, adoptados en 2011.
Precisamente en abril pasado se aprobó un paquete de 63 medidas referidas al sector agropecuario y que conllevan más de 600 acciones a las que se da seguimiento y son perfeccionadas por 7 grupos de expertos, académicos y científicos.
Sin embargo, todas las disposiciones adoptadas en las distintas ramas, como apuntaron los diputados, deben estar acompañadas de un pensamiento innovador, del máximo aprovechamiento de las potencialidades existentes, el ahorro y un cada vez mayor empleo de la ciencia y la tecnología en la búsqueda de alternativas, un aspecto en el que ha insistido en reiteradas ocasiones el presidente cubano, Miguel Díaz Canel.
Aún en medio del complejo panorama, se trabaja por la recuperación de la economía, una meta que necesita del esfuerzo, apoyo y creatividad de todos los cubanos.
