Radio Progreso

Por María Josefina Arce.

El gobierno de la presidenta Xiomara Castro ha puesto su atención en un viejo problema, Honduras es uno de los países de América Latina con un alto índice de violencia de género. Desde 2002 hasta 2021 se registraron más de siete MIL feminicidios.

El pasado año fueron asesinadas 318 mujeres en la nación centroamericana, de acuerdo con la Universidad Nacional Autónoma, que precisa que esta cifra equivale a una muerte violenta  cada 27 horas y 33 minutos.

En lo que va de año, con datos hasta octubre pasado, ya se reportaban en el país 216 feminicidios.

En su discurso de asunción de la presidencia, en enero de este año, Castro afirmó que no le fallaría a las mujeres hondureñas y ha dado pasos concretos para cumplir su promesa. En la actualidad se realiza en los 18 departamentos del país la primera encuesta especializada sobre violencia contra mujeres y niñas mayores de 15 años.

Con apoyo del PNUD, Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, el censo permitirá medir la magnitud del problema, identificar a grupos de alto riesgo y elaborar políticas que garanticen la inclusión y empoderamiento femenino.

Recordemos que  a solo dos meses de mandato Castro suscribió con la ONU un Compromiso Público contra la Violencia hacía Mujeres y Niñas, encaminado a colaborar para formular e implementar en todas las instancias estrategias de prevención y abordaje de este fenómeno, así como la promoción de la igualdad de género.

Asimismo, una de las  primeras medidas de la mandataria fue elevar al rango de Secretaria de Estado al Instituto Nacional de la Mujer, con el objetivo de darle un mayor rango de acción y presupuesto para concretar acciones en favor de las féminas.

El gobierno también trabaja, en conjunto con la Secretaria de Derechos Humanos, diputadas y la sociedad civil, en la Ley integral contra la violencia hacia las mujeres.

Esta norma, que tiene un enfoque preventivo, busca la creación de Fiscalías de la Mujer, juzgados especializados en violencia de género y el fortalecimiento de instancias que brindan atención y protección a quienes han sido víctimas de este flagelo.

El camino no es fácil, Honduras tiene un alto grado de machismo y durante años las mujeres han sido excluidas y visto pisoteados sus más elementales derechos. Sin embargo, el gobierno que preside Xiomara Castro se ha propuesto devolver a las féminas el lugar que les corresponde en la sociedad.