Trabajadores de la empresa eléctrica de varias provincias ya trabajan
en la recuperación tras el paso de Idalia.

Por Roberto MOrejón

Trabajadores de la empresa eléctrica de varias provincias y grupos gubernamentales encargados de evaluar los daños causados por el huracán Idalia, se encuentran en Pinar del Río, la provincia más occidental de Cuba nuevamente castigada por un meteoro.
 
Linieros y evaluadores abren el camino a otros grupos que apoyarán a una región muy afectada por copiosas lluvias y ráfagas de viento de casi 100 kilómetros por hora, causantes de inundaciones notables.
 
Los ríos salieron de su cauce, árboles y soportes del tendido eléctrico fueron al piso y miles de piñareños debieron ser evacuados, pues sus viviendas estaban en peligro.
 
La evacuación, común en los planes de la bien entrenada Defensa Civil de Cuba, demostró su utilidad al constatarse cómo comunidades y carreteras quedaron anegadas luego de la ruta del fenómeno meteorológico.  
 
Las inundaciones costeras también inquietaron a los pobladores de la provincia más occidental de la mayor de las Antillas, quienes además de protegerse ellos y sus pertenencias, ahora esperan para recobrarse de la embestida del ciclón tropical.
 
De ellos también se espera la atención a escuelas con daños causados por el huracán Idalia, cuando quedan pocos días para el inicio del venidero año lectivo.
 
Junto con lo anterior se mantiene como propósito indeclinable atender a las familias y personas en condiciones de vulnerabilidad.
 
Nada debe quedar olvidado, aseguran los pinareños, quienes desarrollaron una rápida ofensiva previo al golpe del huracán para acarrear mercancías y productos agrícolas, y así reducir pérdidas.
 
Esas labores provisorias se hicieron imprescindibles en un territorio que aún no se ha recobrado totalmente del embate del huracán de gran intensidad Ian en 2022.
 
Atender con urgencia las necesidades surgidas por la acometida del huracán Idalia será tarea de Pinar del Río, para poder continuar las faenas con vistas a redimirse del castigo de Ian.
 
Precisamente, el sistema eléctrico, la agricultura y las comunicaciones figuran como los sectores más castigados por lo que fue primero tormenta tropical y luego huracán.
 
La provincia cubana de Pinar del Río, sacudida por  ciclones de forma recurrente, ha iniciado con sus recursos y los que comienzan a llegar del gobierno central, otra ofensiva para mitigar los efectos negativos del huracán Idalia.
 
Todos los ojos de los cubanos miran hacia Pinar del Río para saber de sus necesidades.