Por Raiko Martín

A la cuenta regresiva le quedan apenas cinco jornadas, pero nadie duda de que el estadio Latinoamericano, en La Habana, exhibirá su mejor semblante cuando el próximo día 22 de marzo acoja en su legendario diamante el pulso entre la selección cubana y los Tampa Bay Rays, equipo de las Grandes Ligas (MLB, por sus siglas en inglés) estadounidenses.

El ir y venir de operarios y personal de apoyo es notable. Muchos reconocen no haber visto un acondicionamiento de tanta magnitud en el llamado Coloso del Cerro, pues no solo ha sido retocado el campo de juego.

Antonio López Cubilla, vicepresidente del Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación (INDER) detalló a la prensa el proceso inversionista que se ha realizado en toda la instalación por su aniversario 70.

Los trabajos comenzaron hace algunos años con la instalación de una nueva pizarra y las reparaciones a las torres de alumbrado, entre otras acciones; pero, sin duda, se han acelerado para la ocasión, y este año el financiamiento realizado por el organismo supera los cuatro millones de pesos.

La prioridad ha sido ahora mejorar las condiciones del terreno, al que se le cambió completamente la hierba del infield. Igualmente, se reacondicionó el área del cuadro y el box, se recuperó el sistema de drenaje y se niveló toda la superficie, trabajo realizado con la cooperación de varios especialistas de la MLB, quienes además de asesorar, han aportado algunos materiales y maquinarias para llevar a cabo el acondicionamiento.

Según los expertos, solo faltan pormenores para dejar listo el campo, y uno de ellos sería la homogeneización del color de la hierba con un biofertilizante que se aplicaría dos días antes del choque.

Sin embargo, los trabajos han llegado a todos los rincones del recinto, pues se cambió el acolchonamiento para la protección de los jugadores y del cercado de los jardines, y se mejoró el sistema de alumbrado artificial.

Los graderíos, salones de protocolo, clubhouse y palcos de prensa también fueron retocados ahora para que el estadio estuviese lo más cerca posible de los estándares necesarios para acoger certámenes de primer nivel.

El directivo del Inder señaló además que estos trabajos tienen un cronograma que se extiende hasta el año 2020, y entre los propósitos está completar el cambio de toda la cubierta de las gradas, que comenzó a ejecutarse desde 2014.

Asimismo se espera dotar a la instalación de un adecuado sistema de regadío y está dentro del proyecto el levantamiento de toda la zona de los jardines, área que necesita la siembra de nueva hierba.

Mientras se dan los últimos retoques de pintura en el exterior y se perfilan algunos detalles, los 41 miembros de la preselección cubana continúan su alistamiento en el occidental municipio de San José de las Lajas bajo la atenta mirada de un grupo de entrenadores y glorias del béisbol, todos dirigidos por Víctor Mesa.

Se espera que una jornada antes del duelo, cuando ambas novenas realicen la práctica previa, ya puedan probar las bondades del "nuevo" Coloso.

(Tomado del periódico Juventud Rebelde)