Pedro Sarría, el militar batistiano que salvó a Fidel Castro en 1953 (+Fotos)

Editado por Martha Ríos
2023-08-08 13:39:55

Pinterest
Telegram
Linkedin
WhatsApp

Fidel (D) junto a Sarría en los primeros años de la Revolución.
Foto: Sitio Fidel Soldado de las Ideas

Por Sabdiel Batista Díaz

Pedro Manuel Sarría Tartabull es poco conocido en la historia de Cuba, pero en el verano de 1953, siendo un militar del ejército del dictador Fulgencio Batista, salvó la vida a Fidel Castro (1926-2016).

Luego del asalto a los cuarteles Moncada, en Santiago de Cuba, y Carlos Manuel de Céspedes, en Bayamo, el 26 de Julio de 1953, algunos revolucionarios sobrevivientes se desperdigaron por las cercanías de Santiago de Cuba, en un intento por llegar a la Sierra Maestra.

El ejército batistiano mandó a sus tropas a perseguir a los jóvenes asaltantes, entre los que estaba Fidel.

El teniente Sarría Tartabull pertenecía a ese cuerpo armado. Era un mulato descendiente de esclavos, nacido el 1ro de enero de 1900, en la ciudad de Cienfuegos, en el centro-sur de Cuba.

Sobre ese momento Fidel relató años más tarde en el libro de Frei Betto ‘Fidel y la religión’: “Salimos del Moncada con rumbo a las montañas de la Sierra Maestra y una noche cometimos un error que no habíamos cometido en todos los días que llevábamos caminando, y fue que encontramos aquella noche un pequeño bohío de los que llaman “vara en tierra” y nos guarecimos un poco de la neblina, la humedad y del frío. Y nos quedamos todos dormidos.

“Antes del amanecer llegó una patrulla de soldados que nos despertó con sus fusiles sobre nuestros pechos. Y ocurre una casualidad increíble: había un teniente negro, llamado Sarría, un hombre de energía y que no era un asesino.

“Sus soldados querían matarnos allí mismo, estaban excitados y buscaban el menor pretexto. Nos amarraron. No me conocieron. Yo no consideraba la menor posibilidad de vivir. Entablo una polémica verbal con ellos. Entonces el teniente Sarría dice con fuerza: ¡No disparen! ¡No disparen!…Las ideas no se matan.

“Así repetía aquel teniente negro, Sarría Tartabull: ¡las ideas no se matan! Después supe que me conocía de la Universidad, sabía quién era yo, por eso hablaba de las ideas, y me dijo al oído: No te identifiques, y siguió conminando a sus soldados para que no dispararan.”

Foto tomada del periódico Escambray

Una vez detenidos, por el camino encontraron a jefes superiores que le ordenaron entregar a los prisioneros.

Eran militares despiadados que los hubieran asesinado al momento, pero Sarría les respondió con fuerza: “¡Estos son mis prisioneros y los entregaré donde corresponde!”. Los presentó en el pueblo próximo, asentó las actuaciones en el libro oficial del Vivac municipal y avisó a la prensa para que no pudieran asesinarlos como habían hecho con los demás prisioneros.

La dictadura licenció deshonrosamente del Ejército a Sarría y lo mantuvo preso en la fortaleza de La Cabaña, en La Habana, donde permaneció cinco años y cinco meses repudiado por no haber cumplido la orden de asesinar a todos los asaltantes del Moncada que encontrara, hasta que la Revolución triunfante lo liberó en 1959.

Después del día del triunfo de la Revolución, el teniente Pedro Sarría ―acompañado de alguno de sus hijos y vecinos― se presentó ante Fidel. Este lo llamó aparte y le dijo: “¡Sarría, te hacía muerto!” y él le respondió: “Pues aquí estoy”.

Conversaron un rato, y Fidel le dijo: “Espérame aquí un momento, pues tengo que hacer unas declaraciones”. Cuando terminó, Fidel y Raúl hablaron con otros oficiales, y cuando se acercó al teniente Sarría le dijo: “Capitán: hemos acordado ascenderte a capitán, ¿te parece?”.

El presidente provisional Manuel Urrutia lo nombró su edecán presidencial e inmediatamente integró la Caravana de la Libertad que entró a La Habana el 8 de enero de 1959.

Decidió entonces seguir superándose y a los 59 años de edad ingresó en la Universidad de La Habana, donde había matriculado el primer año de Derecho el mismo año que se graduó Fidel y de allí lo conocía.

Foto: José Raúl Rodríguez Robleda

En la Universidad de La Habana se gradúo de Licenciado en Derecho Diplomático y Consular en 1961; de Licenciado en Derecho Administrativo en 1962; de Doctor en Ciencias Sociales y Derecho Público en 1963 y como Doctor en Derecho en 1964.

Sarría falleció el 29 de septiembre de 1972, a los 72 años de edad. Fidel Castro asistió al sepelio y el comandante Pedro Miret despidió el duelo. Pedro Sarría fue inhumado en el Panteón de las Fuerzas Armadas Revolucionarias. Un busto suyo en bronce está emplazado en el patio del Museo Histórico '26 de julio', otrora cuartel Moncada. (Tomado de Prensa Latina)

 



Comentários


Deixe um comentário
Todos os campos são requeridos
Não será publicado
captcha challenge
up