La Habana, 14 feb (RHC) Un estudio publicado en Cell Reports, develó que existe un interruptor molecular en el cerebro que regula la quema de las grasas y podría ser una forma de controlar el aumento de peso.
Científicos de la universidad de Monash, en Australia, aseguran que ese marcador biológico influye sobre todo lo que se produce en el organismo, tras seguir una dieta.
Los investigadores consideraron que dicho interruptor puede ser una terapia para la obesidad y otros problemas metabólicos como la diabetes de tipo 2.
El equipo de científicos, trabajando con ratones, identificó la proteína llamada carnitina acetiltransferasa (Crat) en las neuronas que procesan el hambre, la cual regula el almacenamiento de grasa después de una dieta.
Además, crearon un ratón con ese componente genéticamente apagado, y a causa de ello el roedor, cuando se le sometía a un ayuno, consumía sus reservas de grasa a mayor velocidad.
Los expertos concluyeron que someterse repetitivamente a una dieta puede conducir a ganar peso, pues el cerebro interpreta que se trata de pequeños periodos de inanición e insta a la persona a almacenar más grasa ante una futura escasez.
La manipulación de esa proteína ofrece la posibilidad de engañar al cerebro para que no reemplace la pérdida de peso aumentando la sensación de apetito y el almacenamiento de grasa, consideraron los investigadores.
Al regular la carnitina podemos asegurar que la pérdida de peso inducida por una dieta se mantiene y no se revierte, justificaron.
Fuente:PL