Nuevo México, 19 sep (RHC) En uno de los esfuerzos más audaces dirigidos por el estado para expandir el acceso a la educación superior, Nuevo México presentará un plan para que la matrícula en sus colegios y universidades públicas sea gratuita para todos los residentes de ese estado norteamericano, independientemente de los ingresos familiares.
La medida se produce cuando muchas familias estadounidenses lidian con el aumento del costo de la educación superior y las discusiones sobre la universidad pública gratuita ganan impulso en las legislaturas estatales y en la etapa de debate presidencial.
Casi la mitad de los estados, incluidos Nueva York , Oregón y Tennessee, han garantizado la universidad pública gratuita de dos o cuatro años para algunos estudiantes. Pero la propuesta de Nuevo México va más allá y promete cuatro años de matrícula incluso para estudiantes cuyas familias pueden pagar el precio de la etiqueta.
El programa, que se espera sea anunciado formalmente por la gobernadora Michelle Lujan Grisham el miércoles y aún requiere aprobación legislativa, se aplicaría a las 29 instituciones públicas de dos y cuatro años del estado. Durante mucho tiempo uno de los estados más pobres del país, Nuevo México planea usar los ingresos crecientes de la producción de petróleo para pagar gran parte de los costos.
Pero otros dicen que los costos de la universidad se han vuelto demasiado abrumadores y elogian los muchos esfuerzos hacia la matrícula gratuita.
Según algunas medidas, la iniciativa de matrícula será la más ambiciosa en un creciente movimiento nacional. Los costos de la universidad y la deuda de los estudiantes han surgido como problemas importantes en las primarias presidenciales demócratas, con dos de los principales candidatos a la nominación, los senadores Bernie Sanders y Elizabeth Warren , que prometen liberar a todos los colegios y universidades públicas. El ex vicepresidente Joseph R. Biden Jr. tiene una propuesta más limitada para eliminar la matrícula de la universidad comunitaria.
Hasta ahora, los estados, no el gobierno federal, han liderado el camino, a veces con la esperanza de que una fuerza laboral más educada atraiga a las empresas y mejore las economías locales. A partir de 2018, 17 estados tenían programas que prometían una universidad gratuita para al menos algunos estudiantes, según un análisis de la Conferencia Nacional de Legislaturas Estatales. La mayoría de esos programas cubren la matrícula solo en instituciones de dos años.
El fondo general de Nuevo México está creciendo gracias a un auge de la producción petrolera en la región. Se pronostica que los ingresos del fondo en el próximo año fiscal superen en unos 900 millones los compromisos de gasto anual de 7 mil millones de dólares.
Cuando los precios y la producción local de petróleo se desplomaron en 2016, Nuevo México recortó los fondos para sus universidades públicas y escuelas especializadas en un cinco por ciento para cerrar una brecha presupuestaria, bajo la ex gobernadora republicana Susana Martínez.
El senador estadual John Arthur Smith, presidente demócrata del comité de presupuesto del Senado, reaccionó de manera optimista el miércoles ante la propuesta. Pero dejó claro que igual tenía reservas sobre la sostenibilidad de los fondos estatales que se utilizarían para pagar por una educación superior gratis.
Lujan Grisham dijo que su administración liderará esfuerzos para que más estudiantes soliciten ayuda federal (o FAFSA) para controlar los costos estatales.
Ella espera que la matrícula gratuita mejore el crecimiento económico al crear gradualmente una fuerza laboral mejor capacitada y compensada.
Las tasas de pobreza en Nuevo México son las más altas en el oeste estadounidense, y solo dos estados en todo el país tienen una tasa de desempleo más alta. Los legisladores están luchando para encontrar maneras de evitar que los jóvenes profesionales se vayan a tratar de prosperar en Colorado, Utah y Texas.
(Cubadebate)
