París, 18 oct (RHC) El Consejo Ejecutivo de la Unesco inauguró este viernes en París sus labores con un minuto de silencio en honor a la Prima Ballerina Assoluta cubana Alicia Alonso, quien falleció la víspera a los 98 años de edad.
En emotivas palabras, la delegada permanente de Cuba ante la organización de Naciones Unidas especializada en temas de educación, ciencia y cultura, Dulce Buergo, compartió con los presentes la tristeza por la pérdida de la bailarina, coreógrafa y pedagoga, así como aspectos de su trayectoria.
Alicia Alonso encarna una personalidad relevante en la historia de la danza mundial, merecedora de numerosos títulos, distinciones y reconocimientos a lo largo de su prolífera carrera artística, los que siempre llevó con sencillez y enorme orgullo como representante del pueblo de Cuba, afirmó.
Buergo recordó en el foro que reúne a delegados de países miembros y personal de la Secretaría de la Unesco que la organización ha sido privilegiada de tenerla entre sus Embajadores de Buena Voluntad (nombrada en 2002) y Embajadora de la Danza Mundial (2017).
La prima ballerina assoluta cumplió "la importante misión como artista de construir puentes culturales de amistad entre las naciones", Alicia, como todos cariñosamente la llaman, fue una mujer de excepcional arte, magia y virtuosismo, de férrea disciplina y voluntad, que no se dejó derrotar nunca por difíciles que fueran las circunstancias, subrayó.
En el Consejo, uno de los órganos constitutivos de la Unesco, que por estos días celebra su sesión 207, la diplomática cubana resaltó su labor como pedagoga, en la creación de un sistema de enseñanza nacional garantía del ballet cubano, de especial alcance tras el triunfo de la Revolución.
De acuerdo con Buergo, merece igualmente destaque su compromiso en la promoción de un movimiento de colaboración internacionalista en el campo del ballet, que la nación caribeña ha extendido a casi medio centenar de países de América, Europa, Asia y África, contribuyendo también a acercar este exquisito género artístico al ciudadano común.
Esta mañana, la directora general de la Unesco, Audrey Azoulay, consideró el fallecimiento de la bailarina y coreógrafa cubana la pérdida de una artista única y generosa.
En su cuenta en Twitter, Azoulay destacó además del talento de la prima ballerina assoluta, su aporte a la popularización y la preservación del ballet clásico. (Fuente: PL)
