Formell, instrumentista, compositor y arreglista, es sin dudas uno de los nombres emblemáticos de la música popular bailable de la mayor de las Antillas, género que revolucionó con la creación de un nuevo y pegajoso ritmo: el songo, refiere Prensa Latina.
Sus inicios en la música se remontan a finales de 1959, cuando integró la banda de música de la Policía Nacional Revolucionaria, pero sus primeros pasos importantes como artista los daría años después al formar parte de la orquesta del legendario Elio Revé.
Sin embargo, el afán de dar vida a sus inquietudes musicales le llevan a crear su propia agrupación en 1969: Los Van Van, formación que cambió en lo adelante la forma en que los cubanos entenderían su música popular.
Los Van Van son un fenómeno de la cultura cubana similar al que en su tiempos fueran las orquestas Aragón, Riverside, la Benny Moré y su Banda Gigante o la de Dámaso Pérez Prado, el Rey del Mambo.
La alineación, integrada desde sus inicios por músicos de probada valía como el pianista César 'Pupy' Pedroso y el percusionista José Luis Quintana 'Changuito' se convirtió en el referente nacional de las pistas de bailes gracias a canciones tan pegajosas como Chirrín chirrán, Marilú, El baile del buey cansao, y Por encima del nivel, entre otras.
Una serie de cambios al formato de la orquesta como la adición de trombones y el empleo de equipos electrónicos y textos centrados en la cotidianidad de la isla marcaron la sonoridad de la orquesta y encumbraron a Formell como uno de los creadores musicales más exitosos de Cuba.
Formell y Los Van Van grabaron decenas de discos, música para el cine, musicalizaron poemas y obras de teatro, de ahí que a lo largo de su carrera fuera reconocido con importantes distinciones como los premios Nacional de Música, el Mundial especial de la Música, el Womex al Artista, y el Grammy a la Excelencia Musical, entre otros.
El 1 de mayo de 2014, a los 71 años de edad, Formell falleció en La Habana, su deceso conmovió a todo un país que vio marcada la vida de varias generaciones por la música de Los Van Van.
Sin embargo, la muerte no significó la de su música y la orquesta que durante más de 40 años dirigió con sabiduría y rigor: hoy Los Van Van, bajo la dirección de su hijo Samuel Formell honran su legado y se mantienen como la agrupación líder de la música cubana.
(Prensa Latina)