Buenos Aires.- EL FUTBOLISTA argentino Fabricio Coloccini, defensa central del club San Lorenzo de Almagro, elogió hoy a la Revolución cubana, cuya valentía de aquellos hombres liderados por Fidel Castro calificó de impresionante.

«Todos sabemos que las grandes potencias siempre abusan de los más necesitados. Afrontar todo eso y cerrarse a las puertas de todo el mundo y así todo subsistir me parece impresionante», expresó en una entrevista concedida al periodista Ezequiel Scher para la página Goal.com, en la que resaltó que lo que los cubanos consiguieron fue algo extraordinario.

A una pregunta sobre cómo se interesó por el tema de la Revolución, el defensor, quien participó en los mundiales de 2006 y 2010, apuntó que fue primero por la figura del guerrillero cubano-argentino Ernesto Che Guevara.

«Una vez me regalaron unas medias con la imagen del Che y no sabía quién era. Me puse a indagar sobre por qué luchaba y así llegué a Fidel Castro y a la Revolución Cubana», relató.

«Viajé a Cuba con dos amigos a los que también les gustaba el tema. Nos encontramos en La Habana, alquilamos un coche y bajamos hasta el este de la isla. Fuimos donde llegó el (yate) Granma y de ahí hicimos casi todo el recorrido que hicieron ellos», rememoró.

«Fue una experiencia hermosa. Estar donde estuvieron ellos parados, que hoy está más urbanizado, pero en ese momento no había nada. Me pareció increíble todo lo que tuvieron que vivir, con las limitaciones que puede dar el terreno y el clima, y que lo hayan logrado.»

Al referirse a lo que difunden los grandes medios sobre la Revolución Cubana el futbolista dijo que en su momento a la isla se le consideraba como terrorista y no. «Cuba era pelear por los ideales y por no ser dominados por las potencias», manifestó.

En su diálogo con el periodista, Coloccini, de 34 años, también abundó sobre su pasión por la historia y el tema de la ocupación británica en las Islas Malvinas, tan sensible para los argentinos, que vivió de cerca cuando fue jugador del club inglés Newcastle.

«Seguía muy de cerca ese tema», dijo. «Está claro que yo estaba en Inglaterra y tenía que respetar. Incluso algunos me hacían bromas y yo lo obviaba porque me considero muy patriota y me molestaba un poco la situación».