Sydney McLaughlin
La Habana, 23 jul (JIT) No ha tenido una noche mejor cierre hasta ahora que la de este viernes, cuando la afición vibró con cada zancada de la estadounidense Sydney McLaughlin, recordista del orbe capaz de hacer enloquecer al graderío del Hayward Field con una carrera de 400 metros con vallas que califica entre lo más espectacular del Campeonato Mundial de Atletismo de Oregón 2022.
Un privilegio ver a esta muchacha de solo 22 años de edad dar la vuelta al óvalo volando sobre cada obstáculo, como si flotara, y con una facilidad pasmosa detener los relojes en 50.68 segundos, tiempo con sabor a quimera para todas sus rivales.
Nadie se atreve a fijar sus límites, ni su romance con la pista que le ha visto fijar tres de las cuatro plusmarcas universales que ha acuñado hasta ahora, desde que en los trials previos a los Juegos Olímpico de Tokio 2022 “disolvió” el tope de 52.15 segundos que estaba en poder de su compatriota Dalilah Muhammad.
Aquellos 51.90 segundos duraron hasta su presentación en la capital nipona. Entonces rebajó la mejor marca de la historia hasta 51.46 segundos, que permaneció en los libros hasta el 25 de junio pasado, cuando durante el campeonato nacional de su país corrió la distancia en 51.41 segundos.
De forma tan vertiginosa ha caído cada registro que a la World Athletics no le alcanzó el tiempo para cerrar el proceso de homologación de aquella marca, de la que nadie se acordará en lo adelante.
A la neerlandesa Femke Bol apenas le alcanzó el esfuerzo para cambiar ahora el color de su medalla olímpica. Sin opciones de asaltar el trono, tuvo que conformarse con un crono de 52.27 segundos que no había alcanzado en la presente temporada.
La ahora desplazada Muhammad completó el trazado en 51.13 segundos y tuvo que contentarse con la presea de bronce y el consuelo de haber reservado para esta final su mejor versión en la actual campaña.
Antes hubo otros papeles protagónicos para estrellas, como la bahamesa Shaunae Miller-Uibo, quien paseó en los 400 metros, y la para la australiana Kelsey-Lee Barber, una vez más poniendo fuera de alcance su jabalina.
Miller-Uibo corrió la vuelta al óvalo con tal soltura que pocos se detuvieron a seguir el recorrido de la dominicana Marileydi Paulino, la única con posibilidades reales de seguirle la pista. Pero para someter a la bahamesa había que, al menos, acercarse a los 49.11 segundos inscritos como referente para el ranking de este año.
La quisqueyana no encontró respuestas y después de unos metros iniciales muy lentos se lanzó a una “cacería” que apenas le alcanzó para colgarse la presea de plata con tiempo de 49.60 segundos.
Para el Caribe quedo la satisfacción de un podio pleno, ya que la barbadense Sada Williams inscribió una nueva plusmarca para su país con 49.75 segundos que le garantizaron el tercer escaño.
Mientras esto sucedía en la pista, la australiana Barber aguardó el momento preciso y solventó su intento en la tercera ronda de lanzamientos en la jabalina con un disparo de 66,91 metros, marca líder de la temporada y fuera de alcance para el resto de sus rivales.
De tal forma se quedó con el mismo oro que conquistó en Doha 2019 y dejó en plata y bronce a la local Cara Winger (64,05) y a la japonesa Haruka Kitaguchi (63,27).
La china Shiying Liu, con apenas dos centímetros menos que la medallista de bronce, se unió al grupo de campeones de Tokio 2020 que se marchan esta vez a casa sin el cetro en su equipaje.
Entre hombres el anfitrión Michael Norman recuperó para su país el cetro de los 400 metros, que sus representantes no ganaron en Doha 2019 ni en Tokio 2020. Para ello cubrió la distancia en 44.29 segundos y fue escoltado por el granadino Kirani James (44.48) y el británico Matthew Hudson-Smith (44.66).
Uno de los momentos más esperados de la velada fue la presentación del sueco Armand Duplantis, quien cumplió lo esperado. Hizo gala de economía de esfuerzo y sobrepasó los 5,65 y 5,75 metros en su pértiga para ratificar que estará en la final como el principal favorito al trono.
Todo parece indicar que apenas encontará rivalidad en otros como el francés Renuad Lavillenie, el brasileño Thiago Braz y el estadounidense Christopher Nilsen, quienes tendrían que pujar por los restantes escaños del podio.
La penúltima fecha de la lid atlética universal se celebrará este sábado con una sesión matutina dedicada a eventos del decatlón y a las eliminatorias de los 100 metros con vallas en que participará la cubana Greisy Robles.
En la tarde se repartirán medallas en seis eventos, entre esos los del triple salto para hombres con el cubano campeón del mundo bajo techo, Lázaro Martínez, entre los favoritos.