La Habana, 26 may (RHC) Autoridades de la agroindustria tabacalera cubana manifestaron que este sector mantiene su actividad, pese al impacto de la Covid-19.

Un reporte del periódico Granma añadió que en medio de la compleja situación originada por la enfermedad, la producción de tabacos exportables no se detiene.

Señaló que el tabaco le aportó a la economía cubana cerca de 270 millones de dólares en 2019, por concepto de exportaciones.

El director de la Estación Experimental del Tabaco de San Juan y Martínez, doctor en ciencias Nelson Rodríguez, aseguró que el dinamismo se debe a la combinación del clima, suelo, experiencia de los campesinos y variedades que se siembran.

Insistió en que si alguien llevara las semillas cubanas a cualquier otro sitio, no lograría el mismo resultado, y dada la relevancia del producto, la actividad se mantiene sobre todo en el occidente.

Recalcó que pese a los estragos de las medidas de barreras económicas, financieras y comerciales de los Estados Unidos contra Cuba desde hace más de 50 años, el tabaco cubano se difunde en la actualidad por 150 países y la demanda no deja de crecer.

Para ello, en medio de la compleja situación originada por la pandemia, la producción de tabacos exportables no se detiene, acotó.

Reseñó que este renglón generó el año anterior 270 millones de dólares, una suma que representa el 70 por ciento de las exportaciones de la agricultura cubana.

Resaltó que detrás de esas cifras, las vegas pinareñas tienen un peso decisivo.

De ellas, y más exactamente del macizo tabacalero de Vueltabajo (municipios de San Juan y Martínez, San Luis, Pinar del Río y Consolación del Sur), sale toda la materia prima con la que se conforman los Habanos, a excepción de la capa, que también se obtiene en otros territorios.

Dijo que hoy la provincia se dedica también a la recolección de la cosecha 2019-2020, al beneficio de las primeras hojas acopiadas y a los preparativos de la próxima campaña. Por su parte, el especialista del Grupo Empresarial Tabacuba, Virginio Morales, sentenció que en el campo quedan aún mil 800 hectáreas repartidas en nueve de los 11 municipios.

Reflejó que sin descuidar las medidas de protección establecidas para evitar el contagio con el nuevo coronavirus, se mantienen abiertas 108 escogidas y 11 micro-escogidas.

Paralelamente, se lleva a cabo la roturación de las mil 190 hectáreas que se destinarán a semilleros en la venidera cosecha y el montaje de 40 nuevos túneles de posturas.

En total, reflejó, para la próxima campaña se pretende sembrar más de 19 mil 700 hectáreas, un área muy similar a la prevista en la 2019-2020, con la cual se confirma que los ajustes al plan de la economía, motivados por la Covid-19, no incluyen la reducción de exportaciones tabacaleras. (Fuente: Prensa Latina)