Madrid, 31 ago (RHC) El líder del conservador Partido Popular (PP), Mariano Rajoy, encara este miércoles la primera votación de investidura, en la que previsiblemente recibirá el rechazo mayoritario a su pretensión de revalidar como presidente del Gobierno español.

En la primera sesión del debate ante el Congreso de los Diputados, Rajoy se presentó la víspera como la única alternativa 'viable y seria' para conducir los destinos de España.

A juicio del gobernante en funciones, él es el único que puede garantizar una administración 'estable, moderada y eficaz', y desestimó la eventualidad de un gabinete del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) y la coalición de izquierda Unidos Podemos.

Advirtió que esa hipotética alianza entre fuerzas progresistas representaría a un 'gobierno de mil colores, radical e ineficaz'.

Sobre el discurso pronunciado por el mandatario saliente, quien no cuenta con los apoyos suficientes para asegurarse otros cuatro años en el poder, el PSOE, principal partido de la oposición, opinó que fue el de un aspirante a la presidencia continuista y agotado.

'Hemos asistido al discurso de un candidato cansado y de un proyecto político agotado, continuista', propio de un 'burócrata' que no da ninguna razón para apoyarlo, dijo a la prensa Antonio Hernando, portavoz de los socialistas en la Cámara baja.

Íñigo Errejón, de Unidos Podemos -tercera fuerza parlamentaria- fustigó 'el tono soporífero' de una intervención que tildó de mediocre y chantajista, al defender que no existe otra opción a un gobierno del PP salvo unas nuevas elecciones, terceras en un año.

En la misma línea se pronunció su compañero y máximo dirigente de Izquierda Unida (IU), Alberto Garzón.

El coordinador federal de IU confió en que el PSOE, cuyos 85 escaños son cruciales para la reelección de Rajoy, no se rinda ante el intento de 'extorsión' del líder de los populares y mantenga el voto en contra de su investidura este miércoles y el viernes.

Además, Garzón emplazó a los socialdemócratas a no desaprovechar la oportunidad de explorar otras opciones de gobierno con Unidos Podemos y el resto de agrupaciones representadas en el Congreso si, como se prevé, Rajoy fracasa en el intento.

Tras comparecer la víspera, el candidato de la derecha se someterá hoy a la votación propiamente dicha, previo debate con las demás agrupaciones con representación parlamentaria.

Para renovar mandato, el dirigente conservador necesita en esa primera votación el respaldo de la mayoría absoluta de la Cámara baja (176 de sus 350 escaños), o más sufragios a favor que en contra en una segunda vuelta, fijada para el próximo viernes.

Hasta ahora apenas cuenta con 170 sufragios a favor: los 137 del PP, los 32 de Ciudadanos y uno de Coalición Canaria, cifra exigua para superar cualquiera de las dos votaciones.

España vive una situación inédita de parálisis institucional desde las elecciones del 20 de diciembre de 2015, que debieron repetirse el 26 de junio por la incapacidad de los partidos para llegar a un acuerdo de gobierno.

Si como es previsible Rajoy fracasa en sus dos intentos (hoy y el viernes) y el 31 de octubre aún no se conformó un ejecutivo, el país se verá abocado a unas terceras elecciones, previstas para el 25 de diciembre venidero.