Panamá, 12 jun (RHC-PL) El expresidente panameño Ricardo Martinelli (2009-2014) fue detenido por la Policía Federal estadounidense en la ciudad Miami, tras la negativa gubernamental del pedido de asilo en ese país, confirmaron fuentes de su partido.
José Raúl Mulino y Rodrigo Sarasqueta, ambos cercanos colaboradores del exmandatario, lanzaron sendos mensajes de apoyo al líder de la agrupación política Cambio Democrático, y reportes de prensa dijeron que familiares también refirieron la detención.
El numeroso equipo de abogados que lo defiende en Panamá se reunió esta noche tras la noticia y se espera algún pronunciamiento de cuáles serán los pasos legales a seguir.
Martinelli se autoexilió en Estados Unidos desde principios de 2015, en un estatus migratorio que guardaba relación con su carácter de inversionista en el país, pero a la vez Panamá hizo una solicitud de extradición para que respondiera en el país por una de las 12 causas abiertas en su contra.
Es reclamado por la justicia panameña por rebeldía, al no presentarse ante la Corte Suprema de Justicia (CSJ) para responder en el expediente que se le sigue como acusado por ordenar escuchas ilegales a un centenar de opositores.
La Policía Internacional (Interpol) emitió Alerta Roja para su captura, según confirmó aquí en mayo pasado Marcos Córoba, comisionado de la Dirección de Investigación Judicial, entidad que circuló a la prensa una síntesis del documento con el número de control es A-3657/4-2017, fechado el 21 de abril pasado.
El exgobernante abandonó Panamá el 28 de enero de 2015, cuando la CSJ aceptó la primera de doce causas en su contra, y desde entonces se comunica con el país a través de redes sociales y videos a distancia, en los cuales insiste en su inocencia y ser víctima de persecución política.
Los demás expedientes responden a hechos de corrupción que lo involucran, pero por su condición de diputado del Parlamento Centroamericano debe juzgarlo la CSJ, la cual hasta el momento lleva 12 procesos paralelos y el más inmediato es por supuestos indultos ilegales al terminar su administración.
Según trascendió en medios judiciales, el proceso que sigue en Estados Unidos estará en manos de un jurado, si como se espera, su defensa apela la solicitud de extradición, por lo que podría demorar la decisión final.
