Bagdad, 8 oct (RHC) El presidente del Parlamento de Iraq, Salim al Jaburi, se reunió con el presidente del Kurdistán iraquí, Masus Barzani, para abordar y calmar la situación política tras el referendo de independencia celebrado hace dos semanas en esa región autónoma.
Durante su encuentro en la ciudad de Saladito exhortaron Al Jaburi y Barzani a calmar la situación política y recurrir al diálogo con una agenda abierta.
El líder parlamentario resaltó la importancia del diálogo sobre la cooperación, los territorios disputados y los intereses del pueblo para poder llegar a la comprensión, pero negó actuar de mediador entre Iraq y el Kurdistán, en línea con el Ejecutivo iraquí, que calificó el referendo de ilegitimo.
Las Unidades de Movilización Popular, Al-Hashd Al-Shaabi, hallaron en la ciudad iraquí de Kirkuk una decena de fosas comunes con restos de civiles y guardias gubernamentales ejecutados por el Estado Islámico.
El reporte difundido por el servicio de prensa de Al-Hashd da cuenta que el grupo paramilitar progubernamental aguarda por especialistas para identificar los cadáveres.
Algunos de los restos pertenecieron a mujeres y niños, agregó.
En el suroeste de Al Hawija, las unidades populares localizaron dos fosas comunes, mientras que otras tres detectaron en las aldeas de Abu Sakhra y al-Therban.
Esa ciudad del suroeste iraquí volvió a manos de las tropas gubernamentales, tras cruentos combates con irregulares del Estado Islámico.
Como consecuencia inmediata, casi 78 mil personas quedaron atrapadas entre dos fuegos, según estimados de la ONU.
A finales de septiembre, el primer ministro iraquí, Haidar al-Abadi, ordenó una ofensiva para recuperar Al Hawija, uno de los últimos reductos del Daesh, acrónimo en árabe para Estado Islámico, en Iraq.
El Ministerio de Defensa calcula que en esas operaciones para retomar un centenar de aldeas murieron más de 550 terroristas.
Los extremistas huyeron o se entregaron a las fuerzas conjuntas iraquíes, aunque todavía algunos se refugian en escondrijos o colocan minas terrestres que ponen en peligro la vida de los residentes o de las tropas.