España, 11 oct (RHC) El jefe del Gobierno español, Mariano Rajoy, ratificó este miércoles su negativa al diálogo que propuso el presidente de la Generalidad de Catuluña, Carles Puigdemont, a favor de una solución para la situación política de esta comunidad que exige su independencia al reino de España.
'No es posible aceptar, bajo la apariencia de diálogo, la imposición de puntos de vista que se hacen imposible aceptar. Tampoco puede negociarse sobre la soberanía del conjunto de España y la indivisibilidad de la nación española', afirmó Rajoy frente al Congreso de los Diputados sobre un balance de la situación en Cataluña.
La Generalitat de Cataluña pospuso este martes los efectos de la declaratoria de su independencia, tras la consulta del pasado 1 de octubre, para abrir un compás de diálogo con las autoridades y el pueblo de España que haga más efectivo el tránsito de la comunidad autónoma hacia una república.
'No tenemos nada contra España, ni contra los españoles, al contrario, nos queremos reentender mejor y ese es el deseo mayoritario que existe en Cataluña porque hoy desde hace ya muchos años, las relaciones no funcionan, y nada se ha hecho para revertir una situación que se ha convertido en insostenible', expresó Puigdemont ante el parlamento catalán.
Este miércoles, durante su comparecencia ante el Congreso de Diputados, Rajoy aseguró que las autoridades catalanas carecen de legitimidad para proponer una declaración unilateral de independencia.
El presidente del Gobierno de España,confirmó en el pleno que el Ejecutivo ha activado el artículo 155 de la Constitución española al requerir formalmente al Gobierno de la Generalitat "que confirme si ha declarado la independencia de Cataluña".
"Este requerimiento, que se produce al amparo del artículo 155 de nuestra Constitución, pretende ofrecer a los ciudadanos la claridad y la seguridad que requiere una cuestión de tanta importancia", ha explicado Rajoy, que ha insistido en que "la respuesta" que de el presidente de Cataluña, Carles Puigdemont, "marcará el futuro de los acontecimientos en los próximos días". "En su mano está volver a la legalidad y restablecer la normalidad institucional" o "prolongar un periodo de inestabilidad, tensiones y quiebra de la convivencia en Cataluña", ha añadido.
'Ni son ciertas sus razones ni son tantos sus apoyos. Tiene los votos y la legitimidad para gobernar la comunidad autónoma, pero no para proponer una independencia unilateral o liquidar el Estatuto de Autonomía', dijo Rajoy.
Opinó que la consulta del 1 de octubre del presente año había sido una 'farsa', porque no fue un ejercicio democrático, sino contra la democracia.
'La democracia no se puede ejercer al margen de las reglas que lo ordenan, y allí donde son violentados es que no hay una democracia. Votar en su democracia o al margen no es democracia', expresó Rajoy.
El mandatario indicó que los gobernantes catalanes usaron su posición institucional para realizar un 'ataque desleal contra las instituciones y la convivencia'. En este sentido, se negó a reconocer los resultados obtenidos durante el referendo.
El jefe del Ejecutivo español también ha afirmado que "nunca Cataluña ha gozado de más libertades, autonomía y reconocimiento", pero que "el independentismo está a punto de dar al traste con la mejor época de la historia de Cataluña". "La independencia no será reconocida por Europa y ahora todo el mundo sabe que tendrá graves consecuencias", ha asegurado Rajoy, subrayando que las empresas están cambiando su domicilio social a otras ciudades españolas.
Respecto a la oferta de diálogo de Puigdemont, el presidente ha recalcado que "se puede hablar de todo lo que la Constitución y las leyes permiten, incluida la propia reforma de la Carta Magna", pero "no por la vía de la amenaza o los hechos consumados".(Fuente/RT, EFE, AVN)