Gaza, 26 abr (RHC)La Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) denunció las sangrientas represiones y asesinatos cometidos por las fuerzas militares de Israel contra las manifestaciones de los palestinos que demandan el cese de la ocupación de sus territorios.
En cuatro viernes de manifestaciones han sido heridos muchos más palestinos en la Franja de Gaza que en los tres años precedentes, aseguró esa organización en un comunicado.
Según revelaron esta semana las ONGs Centro Legal para los Derechos de las Minorías Árabes en Israel (Adalah) de Haifa, y el Centro de Derechos Humanos Al Mezan, de Gaza, desde el 30 de marzo los soldados israelíes han matado en la Franja a 32 manifestantes palestinos con el empleo de proyectiles de combate.
Asimismo, acotan en una demanda legal presentada ante el el Tribunal Supremo de Israel para poner fin a esa violencia, mil 607 de las dos mil 882 personas heridas de bala durante las marchas por el Día de la Tierra en Gaza fueron alcanzadas por munición real disparada por las tropas israelíes. Entre los heridos se incluyen 523 niños y 97 mujeres.
Al respecto, el coordinador humanitario de la OCHA, Jamie McGoldrick, anunció que esa organización entregará dos millones doscientos mil dólares para cubrir parte de las necesidades humanitarias generadas por el elevado número de heridos en Gaza por los efectivos de Tel Aviv.
La ya grave situación, añadió McGoldrick, se agudiza por la violencia de los uniformados israelíes contra el personal sanitario que proporciona primeros auxilios a los heridos en el lugar de las protestas.
Asimismo, sostuvo el alto funcionario, por las dificultades que tienen algunos pacientes palestinos para acceder a cuidados urgentes fuera de Gaza.
Los recursos aportados por OCHA se emplearán en adquirir medicinas deficitarias en la Franja, productos médicos desechables y reactivos de laboratorio, entre otros beneficios directos.
McGoldrick pidió finalmente a que otros donantes internacionales aumenten sus contribuciones para garantizar que las víctimas palestinas de la violencia israelí reciban a corto plazo los tratamientos adecuados.
