Roma, 1 feb (RHC) Estudiantes italianos fomentaron más protestas en todo el mundo contra el cambio climático, impulsados por el ejemplo de la adolescente Greta Thunberg, quien en agosto último inicio los reclamos frente al parlamento sueco.
Jóvenes de Roma, Milán, Turín, Pisa, Génova y otras ciudades italianas decidieron tomar las calles en defensa del ambiente, como parte del movimiento que crece espontáneamente desde las redes sociales a través de las cuales interactúan .
Las etiquetas #FridaysForFuture (viernes por el futuro) y #climateStrike (huelga por el clima) son utilizados por los jóvenes en Twitter, Instagram y Whatsapp con el objetivo declarado de realizar una gran marcha internacional el próximo 15 de marzo para reclamar medidas efectivas contra el cambio climático.
Manifestaciones más o menos numerosas se realizan los viernes, e incluso los jueves, en ciudades de Alemania, Austria, Canadá y Suiza, entre otras, con el marcado interés de convertirlo en un fenómeno global por el futuro de la humanidad.
Destacan entre las protestas las realizadas en Bruselas, las cuales crecen numéricamente cada semana y si la primera, realizada el 1 de enero último, logró movilizar a tres mil participantes, la segunda alcanzó los 12 mil 500 y la más reciente sobrepasó los 35 mil.
Todo comenzó cuando Greta Thunberg, de 15 años, en agosto de 2018 decidió dejar de asistir a clase los viernes y protestar frente al parlamento sueco con un cartel con la frase “huelga escolar por el clima”.
Ello hizo fuera invitada a intervenir en la cumbre del clima de la ONU realizada en Katowice, Polonia, en diciembre.
A los líderes políticos de 200 naciones reunidos en la COP24, Greta les dijo desde el podio: “Ustedes dicen que aman a sus hijos por encima de todo, pero les están robando su futuro ante sus propios ojos”.
“Necesitamos mantener los combustibles fósiles en el suelo y debemos centrarnos en la equidad”, subrayó la adolescente y precisó que sí las soluciones dentro del sistema son tan imposibles de encontrar, “tal vez deberíamos cambiar el sistema en sí mismo”.
“Hemos venido aquí para hacerles saber que el cambio está llegando, les guste o no. El verdadero poder pertenece a la gente”, concluyó.
Pero igual, en el Foro Económico Mundial (Davos), a empresarios y estadistas les dijo: 'Los adultos dicen que hay que dar esperanza a los jóvenes. No quiero su esperanza, quiero que entren en pánico. Quiero que sientan el miedo que siento todos los días y luego quiero que actúen'.
Un movimiento espontáneo a favor de la vida, que florece y al decir de analistas, lo curioso es que surgió como la primera preocupación juvenil, por delante incluso del acceso al empleo y la calidad del sistema educativo.