Argel, 10 abr (RHC) El presidente interino de Argelia, Abdelkader Bensalah, trata de neutralizar las manifestaciones populares de rechazo a su reciente designación con un ofrecimiento para organizar y convocar una elección ''transparente, honesta y regular''.
Un día después de que ambas cámaras del Parlamento -el Consejo de la Nación (alta) y la Asamblea Popular Nacional (baja)- lo confirmaron como jefe de Estado por un período máximo de 90 días, Bensalah intenta tranquilizar el malestar expresado por cientos de personas en Argel y otras provincias.
Fuentes cercanas a la Presidencia señalaron que el flamante mandatario trabaja desde el primer momento para involucrar a la clase política argelina, el 'hirak' (movimiento) popular y las autoridades en un proceso que favorezca el retorno a la normalidad tras 20 años de gobierno de Abdelaziz Bouteflika.
Según el artículo 102 de la Constitución nacional, el presidente del Senado (cargo que desempeñaba desde hace 17 años) sucede al jefe de Estado en caso de dimisión o deceso por un período máximo de 90 días durante el cual deberá organizar elecciones presidenciales a las que no puede presentarse.
Bensalah aseguró que todo el pueblo será 'garante' de las futuras elecciones y anunció la instalación de una instancia que reunirá las condiciones necesarias para la preparación y organización de elecciones nacionales honestas y transparentes, afirmó.
Poco después de la alocución de Bensalah, el jefe de Estado Mayor del Ejército, general Ahmed Gaid Salah, aseguró que la institución castrense trabajará para 'garantizar la tranquilidad' del país.
En Argel, fuerzas antidisturbio emplearon ayer, por primera vez desde la renuncia de Bouteflika, chorros de agua para dispersar a estudiantes y otros manifestantes que se movilizaron hasta la Grande Poste para mostrar su rechazo al nombramiento de Bensalah.(Fuente:PL)