Moscú, 23 jul (RHC) El ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguei Lavrov, reiteró que su país defiende el mundo multipolar y rechaza los intentos del gobierno de Estados Unidos de imponer su hegemonía, así como destacó el avance de nuevos centros de influencia en el orbe.

En Moscú, declaró Lavrov que sobre la base de sanciones, ultimatos y de la aplicación de leyes propias injustas y de carácter extraterritorial, es posible en algún lugar obtener algún provecho, sin embargo, en el largo plazo no existe duda alguna de que Washington se verá obligado a aceptar que el desarrollo económico del mundo exige acuerdos y decisiones justas y el respeto a reglas iguales para todos.

Igualmente el jefe de la diplomacia rusa, afirmó que el mundo es multilateral y surgen nuevos ejemplos en él de nuevas economías, en tanto, ejemplificó que China y la India crecen vertiginosamente en el plano económico y crean con ello nuevos centros de influencia económica y financiera.

 Además consideró que no puede prolongarse por mucho tiempo el hecho de que Estados Unidos intente expandir sus sanciones unilaterales a todos los participantes de la comunidad internacional y con ello lograr éxitos momentáneos.

El ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguei Lavrov, rechazó la injerencia de Estados Unidos en Venezuela y el refuerzo del bloqueo de Washington contra Cuba, antes de iniciar hoy una gira por América Latina.

Acerca de la activación del capítulo III de la ley Helms-Burton, para Cuba el canciller ruso dijo que se trata de una actitud inaceptable, y hace casi 60 años que se aplican esas sanciones que en algún momento las flexibilizan y luego las refuerzan. “Con este actuar Estados Unidos demostró, una vez más, su menosprecio al derecho internacional y a sus propias leyes que pretenden extender a otros países de forma extraterritorial”.

Acerca de Venezuela dijo que cambia para bien, porque al principio había iniciativas como el Grupo de Contacto Internacional, impulsado por la Unión Europea, que se forjó sobre la base de ultimatos de que si realizan elecciones anticipadas, todo iba a ir bien.

Existió el mecanismo de Montevideo, con Bolivia, México, Uruguay, y el Caricom, a favor de que el gobierno y la oposición iniciaran un diálogo y se pusieran de acuerdo entre ellos, sin condiciones previas.