Damasco, 7 ene (RHC) Luego de los diálogos, los presidentes de Siria, Bashar Al Assad, y de Rusia, Vladimir Putin, visitaron sitios emblemáticos de Damasco y corroboraron la actual situación en la región.

Putin en compañía de Al Assad estuvo en la Gran Mezquita Omeya, en pleno centro de la capital siria y el santuario del profeta Juan Bautista, donde escribió en el libro de visitantes y departió brevemente con los anfitriones.

Posteriormente, los dos mandatarios llegaron a la catedral de la Virgen María y en la que Putin obsequió un ícono alusivo a los representantes eclesiásticos.

En la reunión inicial de la visita, los dos dirigentes analizaron los últimos acontecimientos en la región y abordaron los planes para eliminar el terrorismo que amenaza la seguridad de los ciudadanos sirios en la provincia de Idleb, además de tratar la evolución de la situación en el norte sirio.

El presidente Vladimir Putin, quien realiza una visita sorpresiva a Siria, se trasladó al comando de las fuerzas armadas rusas en el país levantino.

Desde el aeropuerto, Vladimir Putin se dirigió al puesto de mando de la agrupación de fuerzas rusas en Siria, y paseó por las calles de Damasco.

En el puesto de mando, al mandatario ruso lo recibió su similar sirio, Bashar Al Assad. Ambos jefes de estado escucharon los informes de la situación en el terreno en varias regiones sirias.

Además, el presidente de Siria expresó su agradecimiento por la ayuda brindada por Rusia en la lucha contra el terrorismo y para el restablecimiento de la vida pacífica en la nación levantina.

De igual forma, Al Assad felicitó cálidamente a Putin y a todo el pueblo de esta nación por la Navidad Ortodoxa. En lo adelante, el presidente ruso prevé la visita a varias instalaciones del estado mesoriental.

Durante la estancia de Putin en Siria, en Damasco tuvieron lugar conversaciones con delegaciones de Rusia y la nación levantina.

En las pláticas con Al Assad, Putin señaló que ahora se podía constatar con seguridad que se superó un gran trecho en el camino para el restablecimiento de la estatidad de Siria y su integridad territorial.

Rusia inició en septiembre de 2015 su participación en la lucha contra formaciones armadas en Siria, mediante el empleo de su aviación de combate, aunque después también se involucraron fuerzas especiales en algunas operaciones, la defensa antiaérea y la Policía Militar.