Bogotá, 14 abr (RHC) El jefe de la Misión de Verificación de la ONU en Colombia, Carlos Ruiz Massieu, pidió a los grupos armados ilegales de ese país que detengan la violencia contra comunidades vulnerables, en especial líderes sociales y excombatientes, en medio de la emergencia por el nuevo coronavirus.
"Así como diferentes sectores en Colombia se están uniendo para enfrentar la pandemia, es necesario que todos los sectores se unan para poner fin a la epidemia de violencia contra líderes sociales, defensores y defensoras de derechos humanos y excombatientes", dijo Ruiz Massieu durante su intervención en una sesión virtual del Consejo de Seguridad de la ONU (Organización de las Naciones Unidas), en la que presentó el informe trimestral sobre la Misión de Verificación en Colombia.
El funcionario dijo que "ha sido alentador" ver cómo los colombianos han encontrado respuestas a esta crisis y han respondido "positivamente" a los llamados a la unión, luego de que el Gobierno decretó un aislamiento preventivo obligatorio entre el 25 de marzo y el 26 de abril para hacer frente al nuevo coronavirus.
Colombia reportó el lunes tres muertes más por COVID-19, con lo que el total de fallecidos aumentó a 112, mientras que los contagios suman 2.852.
Ruiz Massieu también anotó que "una de las prioridades del 2020 debe ser adoptar medidas para proteger a líderes sociales, defensores de derechos humanos y excombatientes", y destacó que "las situaciones en Puerto Asís, Putumayo (suroeste), y Argelia, Cauca (suroeste), muestran que la violencia se ha mantenido en los territorios a pesar de la cuarentena nacional".
Por último, dijo que es "importante fortalecer las bases de la reincorporación a largo plazo y asegurar que los beneficios lleguen a excombatientes, independientemente del lugar en que viven", y sugirió que "apoyar los proyectos colectivos pueden ayudar a reactivar las economías locales".
Según cifras de la organización Somos Defensores, en el primer trimestre del año han sido asesinados 36 líderes y defensores de derechos humanos, pero esa cifra puede aumentar a 60, según la organización, ya que faltan varios casos por verificar.
Por su parte, el partido de izquierda Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (FARC, surgido tras la desmovilización de la guerrilla) sostiene que en lo que va de este año han sido asesinados 24 excombatientes, y que desde que se realizó la firma del Acuerdo Final de Paz, en noviembre de 2016, la cifra llega a 194.
El alto Comisionado para la Paz de Colombia, Miguel Ceballos, indicó que mantendrá a los exguerrilleros del Ejército de Liberación Nacional (ELN) Francisco Galán y Felipe Torres, como promotores de paz, luego de que ese grupo rebelde expresara que no los reconoce como tal.
"Quiero recordarle al ELN que el único que puede definir quién es un promotor de paz es el presidente de la República (Iván Duque), quien tiene toda la autoridad constitucional legal y ética para hacerlo (…) Vamos a seguir contando con el apoyo muy valioso de los promotores de paz Francisco Galán y Felipe Torres, quienes con sus mensajes crean conciencia de la necesidad del cambio de una paz real y completa", dijo Ceballos en un video difundido por su despacho.
Asimismo, el funcionario dijo al ELN que "no es momento de cerrar las puertas" y aseguró que el Gobierno espera que cese sus acciones.
En una carta enviada a la Comisión Facilitadora Civil y que fue divulgada el lunes, el ELN dijo que desconoce a Galán y a Torres como gestores de paz del Gobierno de Colombia, por lo cual descartó que ambos puedan intermediar para lograr un eventual acuerdo.
Galán y Torres recuperaron la libertad en los primeros días de abril luego de que el domingo 29 de marzo el Gobierno los designó como gestores de paz.
Ese mismo día, casi que de manera paralela al anuncio del Gobierno, el ELN indicó que daría inicio a un cese al fuego unilateral por 30 días como un "gesto humanitario" debido a la emergencia por el nuevo coronavirus (causante de la enfermedad COVID-19).
La medida fue puesta en marcha el 1 de este mes.
Sin embargo, Galán pidió al grupo rebelde que adopte un cese al fuego indefinido debido a la emergencia sanitaria.
El Gobierno de Colombia rompió de manera unilateral las negociaciones de paz con el ELN en febrero de 2019, luego de que esa guerrilla se adjudicara un atentado con un vehículo cargado con explosivos en una escuela de cadetes de la Policía, en Bogotá, que dejó 22 estudiantes muertos y 60 más heridos.
Fuente: Sputnik