Brasilia, 7 jun (RT) El Ministerio de Salud de Brasil dejó este viernes de informar sobre la cifra total de casos de coronavirus y de muertes a causa de la enfermedad en el país, una decisión que fue apoyada por el mandatario Jair Bolsonaro.
Actualmente, la página correspondiente del organismo muestra solo los números de casos, muertes y personas recuperadas registradas durante la última jornada.
Tras la decisión del ministerio, la estadounidense Universidad Johns Hopkins, que recoge los datos sobre el nuevo coronavirus en todo el mundo, eliminó temporalmente a Brasil de sus estadísticas.
Actualmente los datos sobre el covid-19 en Brasil vuelven a estar disponibles en la web de la Johns Hopkins, que indica que en la nación latinoamericana se han confirmado 672.846 casos y 35.930 fallecimientos. Brasil sigue siendo el segundo país con más casos positivos después de EE.UU. y el tercero en términos de muertes después de EE.UU. y el Reino Unido.
¿Qué pasó?
Este sábado, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, confirmó el cambio en la metodología de la divulgación de datos sobre el covid-19 en el país.
"La difusión de datos sobre las últimas 24 horas permite seguir la realidad del país en este momento y definir estrategias apropiadas para servir a la población", señaló Bolsonaro en su cuenta de Twitter.
"La acumulación de datos, además de no indicar que la mayor parte ya no tiene la enfermedad, no retrata el momento del país", sostuvo el mandatario, agregando que "otras acciones" para mejorar la notificación sobre los nuevos casos también "están en marcha".
Además, Bolsonaro declaró que a partir de ahora el Ministerio de Salud divulgará los datos acerca de la situación del coronavirus en las últimas 24 horas a las 22:00 (hora local) con el objetivo de "evitar informes [con cifras] menores e inconsistencias".
Previamente este miércoles, el Ministerio de Salud comenzó a publicar un informe diario sobre el covid-19 en Brasil con un retraso de varias horas y ya después de la transmisión del principal noticiario vespertino.
La medida provocó fuertes críticas en los círculos políticos y legales de Brasil. Los parlamentarios ven en ella el riesgo de manipular los números y preparan acciones para el Supremo Tribunal Federal para garantizar la transparencia sobre la realidad de la pandemia, informa el periódico Folha de S.Paulo.