Vacuna rusa Sputnik V
Moscú, 28 oct (RHC) Voluntarios inmunizados con la vacuna rusa Sputnik V manifiesta reacciones adversas, tampoco contrajeron la infección provocada por el nuevo coronavirus o expresas problemas de salud.
Alexánder Guíntsburg, director del Centro Nacional de Investigación de Epidemiología y Microbiología Gamaleya, afirmó a la prensa: "Oficialmente no están siendo monitoreados, pero están en contacto. Que yo sepa, ninguno de ellos ni siquiera se resfrió, ni se enfermó", ha señalado Guíntsburg.
Los primeros ensayos clínicos de Sputnik V comenzaron el 18 de junio y contaron con participación de 38 personas que fueron dadas de alta el 15 y el 20 de julio. Algunos de ellos presentaban reacciones posvacunales durante las primeras horas después de la inyección, como un ligero aumento de la temperatura y dolores de cabeza, entre otras, que desaparecieron por sí solas durante el día. Los científicos afirmaron que todos desarrollaron inmunidad contra el covid-19.
La vacuna utiliza la tecnología de adenovirus humano de dos vectores y fue registrada en Rusia el 11 de agosto. El registro temprano permitió suministrarla a personas de los grupos de alto riesgo en medio de la pandemia, y el 25 de agosto se supo que las autoridades sanitarias dieron luz verde para realizar las pruebas posteriores al registro de Sputnik V y pasar a la fase 3 de los ensayos, con 40.000 participantes.
Los resultados de la investigación de la vacuna fueron publicados en la revista The Lancet a principios de septiembre. En la publicación se afirma que el 100% de los participantes desarrolló una respuesta inmunitaria humoral y celular estable durante las dos fases de los ensayos y que el nivel de anticuerpos contra el SARS-CoV-2 en voluntarios vacunados fue de 1,4 a 1,5 veces más alto que el nivel de anticuerpos en los pacientes que se habían recuperado de covid-19.
Igualmente se informó de la vacuna RUTI contra el covid-19, primera española en recibir la autorización para realizar un ensayo clínico internacional, que se llevará a cabo en Argentina. Este fármaco ha sido desarrollado por el doctor Pere-Joan Cardona, del Hospital Germans Trias Pujol, en Barcelona, y fabricada por la farmacéutica Archivel farma.
Inicialmente planteada contra la tuberculosis, según ha informado la compañía, se prevé que también pueda ser efectiva contra otras infecciones víricas, como es el caso del coronavirus SARS-CoV-2. Por ello, ha recibido la aprobación de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) de Argentina.
Se trata de un estudio de doble-ciego con placebo, con una duración de nueve meses, que pretende evaluar la eficacia de la vacuna RUTI tanto para prevenir la infección, como para disminuir la mortalidad por SARS-CoV-2 en el personal sanitario.
Fuente: Rusia Today